Ciudad del Vaticano.-
Luego de haber autorizado el arresto del obispo polaco Jozef Wesolowsk, ex nuncio en la República Dominicana, quien próximamente será procesado en la Santa Sede por pederastia, el papa Francisco dispuso este jueves la remoción de la diócesis de Ciudad del Este, Paraguay, de monseñor Rogelio Ricardo Livieres Plano, acusado de haber encubierto los abusos sexuales cometidos por sacerdotes que se encontraban bajo su jurisdicción y por malversación de los fondos en la misma diócesis.
“Después de un cuidadoso examen de las conclusiones de las visitas apostólicas efectuadas por la Congregación para los Obispos a la Ciudad del Este”, el Santo Padre procedió a sustituir a monseñor Rogelio Ricardo Livieres Plano, dice el comunicado de la sala de prensa vaticana, que también alude al nombramiento de monseñor Ricardo Jorge Valenzuela Ríos, Obispo de Villarrica del Espíritu Santo, como nuevo Administrador Apostólico de esa sede.
La decisión del Papa, explica el comunicado, fue “determinada por serias razones pastorales” y por “el bien mayor de la unidad de la Iglesia Ciudad del Este y de Paraguay”.
Livieres fue separado de sus funciones tras protagonizar un escándalo en el país sudamericano por defender al sacerdote argentino Carlos Urrutigoity, quien en 2002, cuando estaba en Estados Unidos, fue acusado de abusos sexuales y pedofilia.
El prelado fue transferido primero a Canadá y desde hace nueve años vive en Paraguay, donde se convirtió en vicario general de la diócesis pese a sus poco dignos antecedentes; exponentes de la iglesia local lo definieron como “una seria amenaza para los jóvenes”.
La polémica hizo que el Papa enviara en visita apostólica, a Paraguay, al cardenal Santos Abril y Castelló, arcipreste de la Basílica romana de Santa María la Mayor, y a monseñor Milton Luis Troccoli Cebelio, obispo auxiliar de Montevideo. Sobre la base del informe de estos enviados, Urrutigoity fue removido de su importante cargo, remoción a la que ahora se une la de monseñor Rogelio Ricardo Livieres.
Por la tarde, Livieres expresó su rechazo a su destitución y advirtió, en una carta remitida al prefecto de la Congregación para los Obispos, cardenal Marc Ouellet, que el papa Francisco “tendrá que dar cuentas a Dios” por esa decisión “injusta y arbitraria”. Aun así, dijo que la acatará “como hijo obediente de la Iglesia”.
En cambio, el ex presidente paraguayo Fernando Lugo, ex obispo, aplaudió la medida, diciendo que Livieres “no estaba a la altura”
Con esta medida, el Papa argentino ratificó su intención de llevar hasta las últimas consecuencias la consigna de “tolerancia cero” contra la pedofilia sacerdotal lanzada por la Iglesia durante el pontificado de Benedicto XVI que, hace sólo tres días, alcanzó su clímax con el arresto, sin precedentes, de Wesolowsk.
El polaco es el primer alto prelado que será procesado penalmente por un tribunal eclesiástico bajo la imputación de presuntos abusos sexuales contra menores cuando era nuncio en la capital dominicana y por los que podría ser condenado a entre cinco y diez años de reclusión.
Discussion about this post