Matamoros, Tamaulipas.-
Después de ocho meses de estar alejados de su único hijo porque fracasó su plan de internarse ilegalmente en los Estados Unidos de manera separada, ayer el pequeño Samuel de dos años de edad fue entregado a sus padres en las inmediaciones del Puente Nuevo Internacional, reencuentro que resultó emotivo por las lágrimas y el jubilo que se hizo presentes en éstos.
Autoridades del Consulado de México en Brownsville y la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), delegación Matamoros, pusieron en brazos de los dos al niño que desde el mes de septiembre del año pasado habían dejado de ver.
Los padres del menor explicaron que intentaron cruzar hacia ese país por caminos separados. Para ello, contrataron a unas personas para que lo introdujeran al estado de Texas con documentos falsos, lo cual se pudo lograr.
En tanto, ellos quisieron hacerlo por el Río Bravo, pero en la ciudad de Brownsville, Texas, fueron detenidos y deportados. La madre de nueva cuenta se internó en aquel país, sin embargo, otra vez fue interceptada por la Patrulla Fronteriza y advertida de arresto si la encontraban en las mismas circunstancias.
Los entrevistados narraron que las personas contratadas continuaron su camino con el pequeño Samuel, dejándolo con un familiar de ellos en la ciudad de Houston, Texas. El pariente cambio su residencia a Georgia, llevándose consigo al menor. Los padres constantemente le pedían que se los regresara pero éste les daba evasivas.
Ya cuando les dijo que no se los entregaría, solicitaron a la SRE su intervención, iniciándose los trámites para recuperar a su vástago. En el proceso también participó el Consulado de México en Georgia y el Consulado de México en Brownsville.
Cuando el niño les fue entregado en dicho cruce internacional, ambos rompieron en llanto. No dejaban de abrazar al pequeño, ni de dar gracias a las autoridades que los apoyaron, pues después de 8 largos meses pudieron reencontrarse con su primogénito.
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