México, D.F.-
Se le escapa la calificación al Cruz Azul como agua entre las manos. La Máquina dejó una valiosa oportunidad de acercarse a los punteros de la tabla general, luego de caer 1-2 con los sotaneros Gallos Blancos del Querétaro, escuadra que hizo poco durante los 90 minutos, pero lo suficiente para impedirle a los Cementeros salir con un buen resultado de la cancha del estadio Azul.
Fueron tres puntos de oro para los dirigidos por Ángel David Comizzo. Matemáticamente ya se encuentran salvados, porque se alejaron a 10 unidades de los Estudiantes Tecos, que se ubican en el sótano de la tabla porcentual, cuando restan nueve por disputarse. El objetivo será sumar más unidades para evitar problemas el próximo año futbolístico.
Los capitalinos jugaron el partido con displicencia. Lejos de su real nivel estuvieron Javier Aquino y Christian Giménez, hombres importantes en el medio campo celeste, lo que impidió que se diera una buena conexión con Edixon Perea y Omar Bravo, quienes en varias ocasiones tuvieron que regresar a propio terreno para recuperar balones.
Enrique Meza se mostró desesperado. No paró de dar instrucciones, en particular, le llamó la atención al zaguero Néstor Araujo, quien perdió varios balones que estuvieron a punto de costarles más goles en contra a los locales. Al “Ojitos” se le notó preocupado por la irregularidad que los tiene al borde de la eliminación.
El mal desempeño mostrado en la primera parte le costó a los Cementeros irse al vestidor con el marcador en contra. Cuando estaba por expirar, llegó la anotación de los emplumados, en un centro por el costado izquierdo que llegó a Isaac Romo, quien con un seco remate de cabeza, venció a José de Jesús Corona.
El regaño de Meza hizo reaccionar a La Máquina. Mostraron otra actitud en el complemento. Apenas corría el minuto 46, cuando llegó el 1-1. Paco Flores, quien jugó su segundo partido en el máximo circuito, se escapó por la pradera derecha, sirvió para Edixon Perea, quien remató con la testa ya dentro del área chica, aprovechando que Liborio Sánchez no salió a cortar el viaje del balón.
Con el ingreso de Maranhao en sustitución de Alejandro Vela, se observó un Cruz Azul más ofensivo. “Chaco” volvió a echarse el equipo a las espaldas, pero pagaron caro el haber permitido que el rival creciera durante la primera parte. El tiempo fue insuficiente para poder arrebatarle los tres puntos a los visitantes.
Ya en tiempo de compensación, cayó el 1-2 definitivo. Jesús Corona no alcanzó a despejar un balón que llegó a su posición, lo que aprovechó Efraín Cortés para rematar y vencer la cabaña cementera. Un tanto que cayó como balde de agua fría, ya que La Máquina no pudo ganar en casa al sotanero y la Liguilla poco a poco empieza a alejarse.
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