México, D.F.-
Miguel Herrera se ponía la camiseta azulgrana y su pantalón corto en vez de sus elegantes trajes que hoy usa.
Era el Invierno 2000 y el hoy técnico del América daba sus últimos pases, sus últimas faltas y se encontraba en la recta final de su carrera como jugador. También en ese entonces fue la última victoria de Monterrey sobre los de Coapa en el estadio Azteca.
El sufrimiento es de los regios cada vez que visitan el Coloso de Santa Úrsula. Ni siquiera en la época más brillante del club de la Sultana del Norte, la cual han vivido recientemente, Monterrey ha podido romper la racha de 11 partidos sin ganar a los azulcrema de visita.
A lo más que ha aspirado el Monterrey en sus recientes asistencias al coso de Tlalpan ha sido a empatar, cuando mucho.
De eso pretende abusar el americanismo este fin de semana.
Si bien las Águilas están en zona de calificación a la Liguilla, es de los equipos más balanceados en el torneo y han dado muestras de buen futbol; los rivales fuertes de la Liga se le han resistido.
Simplemente, no ha podido con los contendientes al título.
Con Tigres y Morelia, los cuadros que están arriba del “Ame” en la tabla del Clausura 2012, los PiojoBoys han sufrido descalabros.
De ahí que se generen dudas de si el América está realmente para ser campeón esta temporada o tendrá que esperar al siguiente torneo para ceñirse la corona.
La oportunidad, entonces, luce inmejorable este domingo.
Rayados viene bien, enrachado, con su maquinaria ofensiva bien aceitada al grado de haber hecho 23 goles para ser el mejor arsenal en lo que va del certamen.
Imaginar que los azulcrema puedan triunfar, sería un aliciente de optimismo de cara al cierre de torneo para los de Coapa.
Pero frenar a Humberto Suazo, Aldo de Nigris, César Delgado y Ángel Reyna no será sencillo.
Justo Reyna irá en busca de revancha contra su ex equipo.
Su salida de la institución capitalina no fue amistosa, luego de polémicas declaraciones en contra de sus compañeros, tras perder el Clásico Nacional con el Guadalajara.
En Rayados, el volante ha encontrado el elixir que lo ha devuelto a la vida futbolística.
Luce jovial, emocionado, con la tribuna regia en el bolsillo y se antoja su momento goleador como para vulnerar al americanismo.
Moisés Muñoz irá por evitar todos los embates del Monterrey. Christian Benítez querrá dejar claro que es mejor que los cuatro ofensivos regios, pese a que no luce tan encendido como otras veces.
Mientras, lo que buscará Miguel Herrera el domingo es que la última victoria del Monterrey sobre el América se recuerde cuando todavía era un futbolista correlón y no en el momento en que vivía su primera campaña como flamante entrenador de las Águilas.
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