México, D.F.-
Andrés Manuel López Obrador, precandidato presidencial de la izquierda, aseguró que no es un hombre de resentimientos y que ya perdonó al presidente Felipe Calderón Hinojosa.
Expresó: “Estoy extendiendo mi mano franca a todos. No odio, no soy un hombre de resentimientos. Perdono a todos, le perdono a él en particular. No quiero venganza, busco justicia y el país exige la reconciliación a partir de nuevas reglas.
“Nunca más se debe fincar la prosperidad de unos cuantos en la miseria de la mayoría. Nunca más la corrupción, la impunidad. Nunca más se va a enfrentar la violencia con la violencia, olvidando las causas de la inseguridad”, dijo.
En una entrevista con el diario español “El País”, el aspirante presidencial afirmó que si gana la elección el 1 de julio no abrirá el expediente de los comicios de 2006, cuando perdió por 0.56% de votos ante Felipe Calderón.
Desde la perspectiva del tabasqueño esa investigación es innecesaria, porque ya hay un juicio de lo sucedido, el cual se enmarca en juicio de la historia, el cual “es el más importante”.
Aseguró que ya no es el mismo Andrés Manuel de 2006, porque todo cambia y él ha evolucionado, y hoy tiene más conocimiento de la realidad mexicana, porque ha recorrido el país, donde ha testificado una situación de gravedad en lo económico y social, por lo que ahora busca la unidad y la reconciliación, a fin de afrontar “esta amarga realidad y lograr el renacimiento de México”.
En ese sentido, insistió en la construcción de una república amorosa que recupere valores, pues no es sólo una crisis económica, ya que también es necesario que se atienda el sentido de la honestidad, la tolerancia, el amor al prójimo y la aceptación del pensamiento del otro: “un proyecto de transformación como el nuestro requiere auspiciar una nueva corriente de pensamiento, a partir de que se interiorice la idea de que sólo siendo buenos, podemos ser felices”.
López Obrado agregó que no será un presidente corrupto como, consideró, lo es Calderón: “No sólo es corrupto, es deshonesto, que es peor, porque la corrupción es quedarse con dinero, pero la deshonestidad es quedarse con dinero y además no ser consecuente. Limpiaremos al gobierno como a las escaleras, de arriba hacia abajo”.
De su adversario priísta Enrique Peña Nieto, dijo que encarna la corrupción y ha sido introducido por la televisión, y a pesar de que las encuestas lo sitúen en primer lugar “ la gente no tiene información real de lo que representa, tiene una imagen de telenovela. La televisión quiere imponer al próximo presidente de México”.
Sobre la posibilidad de abrir Pemex al capital privado expresó que no habrá tal, ya que en la práctica las privatizaciones no han ayudado al crecimiento económico.
“Con nosotros no habrá privatizaciones, pero se respetarán los contratos ya otorgados. No queremos un Estado que asfixie a la sociedad civil, sino que promueva el desarrollo con la participación del sector privado. Pensamos incrementar la inversión pública”, expresó el precandidato.
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