México, D.F.-
Niña que se agiganta debajo de los tres postes. Faltan algunos meses para que Cecilia Santiago cumpla la mayoría de edad, pero hace tiempo que es toda una adulta en la cancha.
La confianza que le tiene Leonardo Cuéllar es la mejor prueba. Es la dueña del marco tricolor, la adolescente que en poco más de un año podría cristalizar el anhelo de ser titular en los tres grandes torneos del balompié femenil: Mundial, Juegos Panamericanos y Olímpicos.
Eso explica la felicidad que irradia. El siguiente viernes, ante Guatemala, la Selección Mexicana debutará en el selectivo que otorgará dos boletos a Londres 2012.
Falta cumplir ese importante requisito, pero la carismática meta ya valora lo que representaría jugar tres certámenes de elite en 13 meses.
“Va a ser algo… He venido preparándome bien. Estoy muy feliz de que se me vengan presentando estas oportunidades”, comparte, en charla con EL UNIVERSAL. “He vivido muy diferente el Mundial y los Panamericanos”.
“Cada competencia tiene lo suyo y estoy muy contenta por las personas que me han venido apoyando: mi entrenador, mis papás… Toda la gente que ha estado conmigo, quienes saben lo que me he venido esforzando, y todos los sacrificios han valido la pena”.
Risueña, confiesa que se ha imaginado en los estadios británicos que albergarán el campeonato olímpico de futbol femenil. Nadie puede arrebatarle ese derecho.
A menos de una semana del torneo eliminatorio, se siente “algo nerviosa, pero segura de que hemos venido trabajando bien, hecho partidos buenos, y vamos a demostrar que podemos”.
“Iremos [a Vancouver] con la convicción de que conseguiremos ese boleto”, agrega.
Se trata de su pasaje a un cuento de hadas hecho realidad, ese que ni siquiera pasaba por su mente hace un año.
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