México, D.F.-
El luchador Horuz va que vuela hacia el estrellato: la humildad y sencillez con sus seguidores es su mejor arma, y dio una muestra de ello el pasado martes, cuando tras ganar una batalla más sobre el ring, entregó su máscara a Gabriela Torres, la fiel admiradora y quien orgullosa recibió el premio.
“Siento que comencé el año con el pie derecho, mis primeras dos luchas de 2012 en la arena y con triunfos, además cumpliendo la palabra de entregar esta máscara a una seguidora que ha estado al pendiente de mi carrera”, valoró el esteta.
El tapatío recordó el significado de la capucha: “Es una tapa que significa mucho en mi carrera, la última con el diseño original de Horuz, además, el color negro señala la sangre ruda que corre por mis venas”.
“Estoy convencido que las máscaras buscan a su dueño, cuando regalamos una máscara es porque nos da una buena corazonada la persona, porque la valora y no la va a arrumbar”, dijo.
Gabriela no paró de sonreír, quizá por nervios, seguro por la emoción de estar frente al ídolo que ha seguido durante años en las arenas: “Gracias a Horuz, créanme que esta máscara no pudo quedar en mejores manos”.
Recordó que sigue al luchador alado desde que empezó su carrera profesional, “cuando luchabas como Hijo del Faraón y la primera vez que te vi como Horuz de inmediato me di cuenta de que eras el mismo luchador, tus ojos te delataron”.
Feliz, le deseó lo mejor al gladiador: “Que este año sea el mejor en tu carrera, que sigas siendo humilde y sencillo y sobre todo que muy pronto llegues a los sitios estelares de las carteleras”.
Gabriela, acompañada por su esposo, presumió la afición que la ha ligado con Horuz y aprovechó para que éste le autografiara el cartel y el boleto en el que se anunciaba la primera batalla del personaje Horuz: “Fue en la arena México y los conservo como muestra de mi pasión por la lucha libre y en especial por Horuz, es el nieto del Ángel Blanco y está destinado para ser una estrella de los cuadriláteros”.
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