Washington, D.C.-
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció hoy una ambiciosa iniciativa para atacar el hambre y la desnutrición en África y sacar de la pobreza a 50 millones de personas en ese continente.
En un discurso pronunciado en anticipación de la reunión-cumbre de líderes del Grupo de los Ocho (G-8) que se llevará a cabo en Washington este fin de semana, Obama subrayó que el nuevo esfuerzo responde a un imperativo multidimensional.
“La seguridad alimentaria es un imperativo moral, pero también un imperativo social y también un imperativo económico”, dijo.
Obama recordó como el alza en los precios de los alimentos no sólo puede arrastrar a millones de personas a la pobreza, sino también provocar disturbios “que cuestan vidas y pueden llevar a la inestabilidad”.
“Ese peligro aumentará si una creciente población no es confrontada con una mayor producción de alimentos, por lo que reducir la malnutrición en el mundo avanza hacia las causas de paz y seguridad”, señaló.
La llamada Nueva Alianza para la Seguridad Alimentaria y Nutrición representará una continuación del compromiso adoptado hace tres años por los líderes del G-8 en su encuentro en Italia.
Obama dijo que esas naciones se comprometerán a concretar esos compromisos a los que se han sumado ya 45 compañías de algunas de las principales corporaciones del mundo con un aporte de más de cuatro mil millones de dólares.
Los primeros tres países que se verán beneficiados con esta nueva iniciativa serán Tanzania, Ghana y Etiopia, con el propósito de impulsar sus exitosos programas de agricultura a los que se sumarán en breve otras tres naciones.
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