México, D.F. / Octubre 27.-
Por fin llegó la confesión de Thalía. “Me ha costado mucho despojarme de la culpa que sentí por el secuestro de mis hermanas; fueron meses, incluso años, de muchos cuestionamientos y conflictos”, escribe la actriz en su libro “Cada día más fuerte”.
Durante esta semana, Thalía ha viajado por ciudades de Estados Unidos para presentar esta autobiografía en uno de cuyos capítulos narra lo que vivió al enterarse del secuestro de sus hermanas Laura Zapata y Ernestina Sodi en septiembre de 2002.
El próximo fin de semana firmará libros en Chicago y su editorial ha publicado algunos adelantos, entre ellos un pasaje en el que la cantante habla del daño que le provocó el secuestro de Zapata y Sodi.
“Un suceso de esta magnitud provoca daños internos en la relación estructural de la familia que vive este traumático evento, y cada cual lo procesa a su manera”.
Luego de que fueron liberadas, Laura Zapata tuvo varias fricciones con Thalía, la más fuerte por querer utilizar su nombre en una obra de teatro basada en el secuestro. Se dijo entonces que Thalía le prohibió mencionarla a ella y a su marido Tommy Mottola, quien habría pagado el rescate.
Ahora, en su libro Thalía revela: “A Laura y a mí el secuestro nos distanció muchísimo, hasta dejamos de hablarnos durante varios años. Laura sentía que nadie podía comprender su dolor y por más que yo quisiera apoyarla, no había nada que pudiera decir o hacer para ayudarla”.
La reconciliación de las hermanas sucedió apenas este año cuando murió su madre Yolanda Miranda.
El miércoles, en su cuenta de Twitter, Thalía escribió: “ A veces no vemos claramente lo que nos hace crecer hasta que paramos y pensamos en ello. ¡Tan importante!”.
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