Ciudad del Vaticano / Octubre 14.-
El Papa Benedicto XVI pidió hoy a los administradores públicos actuar con “gran dignidad” y con un “vivo sentido de la responsabilidad”, porque su función civil es tan eminente que casi reviste un carácter sagrado.
En el Palacio Apostólico del Vaticano el pontífice recibió a un grupo de prefectos de Italia, funcionarios del Estado responsables de vigilar la seguridad y el orden público en las diferentes regiones del país, acompañados por el ministro del Interior, Roberto Maroni.
Según el Papa, al trabajo en la administración pública ha de entenderse “no como algo impersonal o burocrático, sino como una ayuda atenta a los ciudadanos, ejercitada con espíritu de servicio”.
Ante una situación compleja y difícil debido a la incertidumbre económica los exhortó a no desanimarse y a afrontar las cuestiones “con gran sentido del deber, con prudencia, sin faltar nunca a la verdad y al valor en la defensa de los bienes supremos”.
“Como altos representantes del Estado, en el ejercicio de vuestra responsabilidad están llamados a unir autoridad y profesionalidad, sobre todo en los momentos de tensión y de contrastes”, instó.
El pontífice citó como ejemplo a San Ambrosio, obispo de Milán y administrador público de su época, cuya vida constituye un ejemplo de rectitud, en especial por su real seguimiento de las leyes, su firmeza contra las injusticias y las opresiones.
“El testimonio de Ambrosio sea de estímulo y de ánimo para que vuestro trabajo pueda ser, cada día, al servicio de la justicia, de la paz, de la libertad y del bien común”, apuntó.
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