Acapulco, Gro.-
Sonríe de forma espontánea. Acapulco le trae buenos recuerdos. Y es que Gisela Dulko se ha convertido en una de las consentidas del público guerrerense y está lista para defender la corona obtenida en 2011 en el Abierto Mexicano de Tenis.
Ubicada en el puesto 68 de la clasificación WTA, la argentina regresa a uno de sus torneos favoritos dispuesta a dejar en el camino a cualquiera que intente frenar su paso; incluso a la italiana Flavia Penneta, con quien se coronó campeona de dobles en el Abierto de Australia en 2011.
A pesar de su eliminación en el Abierto de Monterrey, Gisela espera otra historia en Acapulco.
El sueño olímpico es otro de los pendientes en la agenda de la argentina. Es por ello que desde hace algunos meses dejó de jugar con Penneta y tiene como pareja a su compatriota Paola Suarez, finalista en 2002 en Acapulco y ganadora de la medalla de bronce en los singles de Atenas 2004.
Además de Gisela integran el cuadro principal Roberta Vinci y Sara Errani de Italia, Lourdes Domínguez de España, y Alize Cornet de Francia entre otras.
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