Las volibolistas mexicanas Mayra García y Bibiana Candelas salieron a competir como alemanas.
O al menos a la distancia así parecía, puesto que debido a que los directivos responsables no tuvieron la delicadeza de averiguar cómo tenía que ser el traje para poder competir. Las mexicanas, en lugar de poner atención a los detalles de su encuentro ante la potente dupla brasileña, se vieron en la necesidad de conseguir de último momento dos trajes y como ya no había verdes acabaron vistiendo en su top los colores alemanes, negro con vivos rojos y oro.
“El uniforme de Atlética no lo pudimos usar porque de entrada no es una marca homologada por la Federación Internacional de Volibol (FIVB), después tenía la bandera de México en el lugar incorrecto y el logo del Comité Olímpico Mexicano (COM) no puede tenerlo por reglamento”, señaló Candelas luego del partido que perdieron por dos sets a uno en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.
La FIVB es muy estricta con los trajes de baño que admite en sus competencias. Saben bien que el éxito del volibol de playa es justo el pequeño espacio que ocupan sus uniformes y lo atractivo de estos.
Por eso exigen que el traje esté autorizado. Detallan incluso los centímetros cuadrados que debe medir para cubrir sólo lo necesario.
No están eliminadas
Aunque Candelas y García cayeron en su debut ante la dupla conformada por Talita Rocha y Renata Ribeiro, sacaron de este partido valiosas enseñanzas para su siguiente desafío ante la dupla de Grecia conformada por Vasiliki Karantasiou y Vasiliki Arvaniti.
“En el siguiente compromiso no hay que precipitarnos, el primer compromiso nos sirvió para quitarnos presiones”, mencionó Candelas con confianza de avanzar.
“Las griegas atacan fuerte, tienen un buen servicio, hay que estar atentas y reaccionar con inteligencia”, agregó.
Discussion about this post