Se convierte rejoneador Santos en
único triunfador en Plaza México

México, D.F. / Marzo 2.-
El rejoneador potosino Gastón Santos se convirtió en el único triunfador de la corrida 21 de la Temporada Grande 2008-09 en la Plaza México, tras cortar una oreja y sumar dos en un par de presentaciones que tuvo en este serial.

También estuvo en el ruedo el jalisciense Humberto Flores, el capitalino José Mauricio y el michoacano Pepe López, quienes se fueron con las manos vacías al carecer de suerte en sus respectivos lotes.

Se lidió un toro de la ganadería de Puerta Grande, que fue regresado por su falta de presencia y trapío, y fue sustituido por otro de Montecristo, que resultó propicio para el lucimiento del caballista.

Para los toreros de a pie se corrieron seis ejemplares del hierro de Los Ebanos, que tuvieron una buena presencia, aunque su juego resultó complicado y bastante irregular.

En este festejo se dio la despedida de los ruedos del experimentado picador de toros mexicano Delfino Campos, quien dijo adiós a la profesión después de cumplir 47 años de exitosa carrera.

Gastón Santos abrió el festejo con “Azucarero” de Montecristo, luego que “Pollo”, de la dehesa de Puerta Grande, fue regresado.

Logró una monta variada y lucida con sus cabalgaduras “Ovidio”, “Rayito” y “Tenorio”, ante el agrado del escaso público que acudió al coso de Insurgentes. Remató bien la labor con rejón mortal en todo lo alto para cortar la única oreja de la tarde.

Por su parte, Flores lidió a “Ardido”, de 476 kilos, con el que se esmeró y batalló en serio en sus intentos por lucir, sin embargo, el astado poco colaboró. Sufrió un puntazo en el cuerpo, sin mayores consecuencias. Despachó de espadazo y se fue con palmas.

Con “Criado”, de 497 kilos, Flores volvió a batallar por ambos lados del ejemplar, sin embargo, su empeño y valor le redituaron algunos buenos pases naturales y de derecha que gustaron. Mató de espadazo y salió al tercio.

En tanto, el capitalino José Mauricio lidió a “Traicionero”, de 481 kilos, con el que estuvo valiente y empeñoso, a pesar de la poca calidad que tuvo el ejemplar. Se tardó en matar y se llevó un aviso con leves palmas.

Con “No doy una”, de 475 kilos, Mauricio se mostró voluntarioso y entregado a pesar que el burel no ayudó, aunado al fuerte viento que lo molestó durante su lidia. Despachó de media ración y se fue con ovaciones.

Pepe López lidió a “Alfredito”, de 475 kilos, con el que poco pudo lograr pese a su valor y voluntad. Tuvo problemas al matar, se llevó un aviso y salió entre leves palmas.

Cerró la tarde con “Mentiritas”, de 459 kilos, con el que batalló sin éxito, en un trasteo más de ganas que de calidad y en el cual no pudo someter a su rival. Despachó de pinchazos, espadazo y descabello, se llevó otro aviso y se fue en silencio.