Cd. Victoria, Tamps. /Octubre 21.-
El cambio climático ha alcanzado ya a Tamaulipas, donde este año se registraron temperaturas extremas que superaron los 42 grados en el verano anterior, hasta congelantes, menores a cinco grados en los primeros meses de 2010.
Un estudio realizado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) revela que en los últimos 40 años se ha registrado un aumento de un grado centígrado la temperatura en esta entidad.
Refiere que las temperaturas máximas históricas han llegado a superar los 49.5 grados, como en Gómez Farías en el mes de mayo de 1973, mientras que en junio de 1998 se registró una temperatura histórica de 49 grados en el municipio de Padilla.
Otras poblaciones que sobresalen con temperaturas récord son San Fernando, con 46 grados centígrados registrados en el mes de junio de 2002, seguida por Ciudad Victoria con 42.4 grados centígrados en julio de 2010, y Villa de Casas con 42 grados en junio pasado.
En invierno, el nivel general de temperaturas revela que en 1971 fue de 17 grados centígrados, mientras que para 2009 fue de 18.2 grados centígrados.
Las temperaturas más frías de los meses de enero y febrero de 1971 fueron de 11 grados centígrados, mientras que en 2009 fueron de 12 y 13 grados centígrados, refiere el estudio.
Revela que el estado también ha registrado temperaturas mínimas históricas en enero de este año, al reportar menos 5 grados centígrados en el municipio de Miquihuana, seguido por Victoria, que registró menos 2 grados centígrados en la zona de Altas Cumbres.
Por su parte, el ecologista Ubaldo Martínez Avalos manifestó que las lluvias atípicas, ciclones y fríos más intensos son los primeros efectos del cambio climático en Tamaulipas.
Consideró que aún es tiempo de frenar esta situación, pero se deben sumar autoridades y la propia población, la cual debe cambiar sus hábitos y proponerse cuidar y conservar la naturaleza.
“Para esto hace falta mucho trabajo; sin embargo, falta la cooperación de la ciudadanía, la cual debe participar desde su hogar, ahorrando todo lo posible la energía eléctrica, no tirando basura en las calles o baterías que contaminan los mantos acuíferos”, dijo.
Estableció que en los últimos años se han sumado esfuerzos para rescatar algunas áreas olvidadas como el río San Marcos, el cual fue limpiado de basura por diversas organizaciones ecologistas.
SIn embargo, hace falta que la autoridad ponga su granito de arena no permitiendo que se contaminen y dando un buen uso a estas áreas, consideró.
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