Hemorragia cerebral, principal causa de muerte en Coahuila

Torreón, Coah. / Octubre 21.-
La enfermedad vascular cerebral (EVC) o hemorragia cerebral, es una de las principales causas de muerte en el estado de Coahuila, únicamente durante el 2009 se registraron 273 defunciones.
Este mal presenta muy pocos síntomas entre los cuales destacan intensos dolores de cabeza que se acompañan de náuseas y vómito, informó el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
La hemorragia cerebral o enfermedad vascular cerebral representa una emergencia médica y sus secuelas dependerán de la ubicación en la lesión del cerebro.
Los pacientes que llegan a sobrevivir a un EVC en el 80 por ciento de los casos quedan con diverso grado de invalidez o déficit neurológico, pueden ser alteraciones en el habla, debilidad muscular, parálisis de una parte del cuerpo y pérdida visual sensitiva entre otros.
Principalmente afecta a personas diabéticas, hipertensas, obesas, adictas al tabaco y al alcohol, quienes tienen hasta cinco veces más probabilidades de sufrir una enfermedad vascular cerebral (EVC).
La jefatura delegacional de Prestaciones Médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social en Coahuila explicó que la Enfermedad Vascular Cerebral es silenciosa y cuando se manifiesta es porque ya ocurrió la lesión.
El único signo de alarma que suele presentarse es un intenso dolor de cabeza, que se acompaña de náuseas y vómitos y en ocasiones hay pérdida del estado de alerta.
La diabetes mellitus, obesidad, tabaquismo, alcoholismo y la elevación del colesterol y triglicéridos favorecen la formación de placas de grasa al interior de las venas y el endurecimiento de las mismas, lo que origina una mala circulación de los vasos del cerebro.
Durante el año 2009 se registraron 273 defunciones por hemorragia intraencefálica, secuelas de enfermedades cerebrales, infartos cerebrales y accidentes vasculares encefálicos agudos.
Como parte de las medidas preventivas se recomienda realizarse revisiones periódicas para valorar los niveles de azúcar y lípidos (colesterol y triglicéridos), así como de la presión arterial a partir de los 25 años de edad, sobre todo si es obeso, sedentario o adicto al tabaco, se indicó.