‘Chepo’, al frente de un grupo de guerreros

Pasadena, California / Junio 26.-
Es el hombre que marca los pasos a seguir por el grupo de guerreros con temple a prueba de todo. La Selección Mexicana es su reflejo, por lo que José Manuel de la Torre disfruta la épica obtención de la Copa de Oro 2011, sexta en la historia para el equipo nacional.
El triunfo tiene un valor agregado por los innumerables obstáculos que el plantel tuvo que sortear durante el más reciente mes.
“No hay mejor momento que la victoria”, sentencia un sonriente Chepo “Todo lo que quedó atrás ha servido para fortalecer al grupo. Saben que muchas cosas están fuera de nuestras manos y no nos competen”.
Encumbrado como el hombre que no conoce la derrota al frente del representativo nacional, De la Torre se rehúsa a diagnosticar si vive el mejor momento de su trayectoria como director técnico. Prefiere resaltar la mentalidad ganadora de los seleccionados mexicanos.
“Se tiene que rescatar todo, pero creo que si hay algo por encima de lo demás fue la fortaleza mental que tuvieron para sobreponerse a todas las adversidades”, subraya orgulloso.
El objetivo final será clasificar al Mundial Brasil 2014, pero el tapatío admite la relevancia de ganar el cetro de la Concacaf y, por ende, adjudicarse el boleto para la Confederaciones de 2013. Es el bálsamo que faltó al proceso anterior, que fue iniciado por Hugo Sánchez, aunque Javier Aguirre lo finalizó, además de los breves pasos de Jesús Ramírez y Sven-Göran Eriksson.
Esa inestabilidad parece lejana gracias al espectacular triunfo de anoche, que también marcó la primera voltereta ante el máximo adversario de la región, tras perder por dos anotaciones de diferencia.
“La verdad que nos deja muy contentos y tranquilos, porque sabemos que el proceso va poco a poco, se está fortaleciendo y era importante ganarla (Copa de Oro), por lo que trasciende”, reconoce. “La cuestión es que se trascienda como grupo y empieza a lograrse”.
El rostro de piedra desaparece con el dulce sabor de la victoria, aunque José Manuel comparte que el gesto adusto que le caracteriza frente a las cámaras no se debe a una forma de ser.
“Es verdad que me muestro muy serio… No soy actor, sí me imponen, pero no quiere decir que no lo esté disfrutando (el momento)”, ataja. “Por supuesto que es para relajarse, con la mesura que lo lleva todo. Este torneo fue muy complicado y estamos disfrutando lo que hemos conseguido”.
En especial él, por más que ganar su primer torneo le sea ya una costumbre.