Reynosa, Tamps. / Junio 21.-
El éxodo de indocumentados nacionales y extranjeros hacia Estados Unidos disminuyó hasta en un 50%, hecho que defensores de los Derechos Humanos atribuyen a la ola de violencia contra migrantes que se desató en la región de San Fernando.
Margarito Grajeda López, dirigente de la Organización no Gubernamental “A Corazón Abierto A.C.”, indicó que en comparación a años anteriores, hoy el fenómeno migratorio ha disminuido considerablemente, y lo achacó también a las fuertes temperaturas que impactan en esta región fronteriza.
“Ahorita llegan 6 ó 7 personas a la frontera para intentar cruzar a Estados Unidos, cuando antes lo hacían en grupos grandes, y se lo atribuimos principalmente a la inseguridad y a las temperaturas que han alcanzado hasta los 40 grados centígrados”, señaló.
Aclaró que hay gente que se va al Río Bravo y que hace como que está nadando, y que en el menor descuido trata de cruzar hacia los Estados Unidos por esta frontera, desafiando la estrecha vigilancia que existe por parte de las autoridades de migración y de aduanas del lado americano, es decir del Valle de Texas.
La organización “A Corazón Abierto” se encarga de entregar agua y comida a migrantes en las zonas del Río Bravo, por donde normalmente cruzan los indocumentados en busca del “sueño americano”, no sin antes informarles los riesgos y peligros que corren en su intento.
Para concluir, el activista destacó que lo que no ha disminuido es la deportación masiva de migrantes que realizan las autoridades estadounidenses, y hasta esta fecha siguen expulsando a grupos de 100 y de hasta 200 indocumentados por día.