Un buen brujo ¡y a lo mejor la hacemos!

A Tamaulipas como a México este año ha resultado nefasto, catastrófico, muchos eventos y sucesos hemos padecido, algunos indiscutiblemente buenos, como el de tener una balanza monetaria sólida, el resto son decepciones y dolores de cabeza.
Hablamos de serios dolores de cabeza: El suceso de la elección atrajo la atención de todos. Aún los anodinos hubieron de poner atención a lo ocurrido, en donde el Revolucionario Institucional se alzó con una brillante victoria en 9 de los 12 estados en cuestión y aunque en alguno la diferencia fue estrecha, el triunfo fue inobjetable.
Más eso no es lo que nos inquieta. En esta ocasión en nuestro estado un extraordinario candidato a la gubernatura del Estado resultó muerto en forma artera y despiadada, por individuos vestidos de Marinos, los que con su acción pretendieron detener lo indetenible.
La elección del 4 de julio reconfirmó lo que era un secreto a voces. Rodolfo Torre Cantú desde el más allá ganó la elección por abrumadora mayoría, en la persona de su hermano Egidio, quien desde ya es el gobernador ganador de Tamaulípas. Desconozco si continuará con los programas trazados por su hermano, pues hay que tener en firme que cada cabeza es un mundo. Egidio de esto no escapa y hará lo pertinente, para realizar lo que en su imaginación se cree.
Hoy Reynosa y otros municipios Tamaulipecos nos vimos amenazados por un fenómeno natural, un huracán, el mismo que destruyó Monterrey así como muchos municipios de ese Estado vecino e igualmente Coahuila.
Como que el destino se ensaña contra el país; sufrimos de una guerra, insisto, “no pedida” mucho menos imaginada, simplemente, caminar por las calles, puede ser mortal, por las carreteras ni se diga señor Presidente.
¿Si no hacemos esto, como nos tendría el crimen organizado? Realmente no podría responder, sería ligereza hacerlo, pero antesno había tiroteos en las calles y podíamos transitar por nuestras carreteras con tranquilidad.?Sí había peligros pero eran de tránsito, pues las carreteras nacionales, son estrechas, angostas, excepto las de paga, algunas concesionadas; entonces uno se pregunta, ¿por qué no invertir en un verdadero plan carretero? Porque este le daría trabajo a millones de mexicanos, que están hoy en la pobreza más infamante; en fin, son cuestión de enfoques.
Lo que sí a pesar de mi escasez, en esto de la República, llama poderosamente la atención, el estado en que se encuentra la nación, como dice Catón, “Hoy nos toca arreglar la República”.?Eso no lo sé, hay sucesos de todas dimensiones que ocurren, los diablos andan sueltos, no se ve un futuro previsible ni sendero que indique una ruta buena o mala; no tenemos vereda diseñada.
En ocasiones cuando las cosas apretaban antaño los jefes guerreros de tribus aborígenes nacionales, utilizaban brujos, sujetos quienes tenían, comunicación con espíritus, a quienes invocaban, para resolver sus problemas.
En la actualidad las cosas no cambian mucho, los brujos de Catemaco, la Petaca y los de Ixmiquilpan son muy socorridos y urgentes como estamos de un camino, sea o no abstracto, tal vez nos sanarán de las tantas plagas que hoy nos agobian, para que se disiparan y saliéramos del terrible pozo en que nos metieron sin siquiera preguntar.
En fin, como todo es abstracto no sé si funciona, más nada se pierde como sucedió, con el Tri y el Mundial. Los jugadores, -si así debe llamarseles- regresaron como héroes. A ellos los entrevistan a cada rato, ¿vaya usted a saber? porque anotaron tres goles, que aún no sabemos el precio, de a como nos salió cada gol.
Pero todos estuvieron muy conformes y contentos, nadie protestó, ¿así que por qué no probar? Una buena sanación y abur ¡curados! Todos contentos, aunque nos inundemos…