Monterrey, N.L. / Mayo 26.-
Luego de que se les prometió el pago del finiquito a quien quisiera separarse de su cargo, elementos de la Policía regia se encuentran protestando en la corporación ubicada en el Parque Alamey, esto ante el incumplimiento de la administración encabezada por Fernando Larrazabal Bretón.
El pasado lunes el edil dio como plazo hasta las 19:00 horas de ayer para que el uniformado que quisiera retirarse pasara al área de recursos humanos donde se les liquidaría al cien por ciento.
Sin embargo, según los 230 inconformes –quienes se dieron cita a temprana hora–, Larrazabal Bretón faltó a su palabra, pues funcionarios les argumentaron que no hay recursos.
Los policías insistieron en que no es la primera vez que la administración hace promesas incumplidas, ya que aún no se mejora el “incremento” salarial prometido hace varios meses.
Todo esto se da a raíz de que el alcalde giró instrucciones el lunes 24 de mayo para que los 594 uniformados fueran acuartelados en las instalaciones de la Policía regia y sometidos a pruebas de control de confianza.
Los resultados de las evaluaciones realizadas serán dados a conocer el próximo viernes.
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