MÉXICO, D.F.-
A sus 85 años, la actriz Evangelina Elizondo ha experimentado de todo como iniciadora de una familia, ya sea como abuela o bisabuela.
Acaba de nacer su nuevo nieto, hace seis meses y, con un bisnieto, sufrió duro accidente hace años.
Otro nieto no le creía que ella era la voz de “La Cenicienta”, y uno más fue asesinado en Estados Unidos.
Pero hay que ir por partes con esta familia que es numerosa y la cual, bromea la actriz con motivo mañana del Día del Abuelo, se encuentra desperdigada por todo el mundo.
El bebé se llama Riku Javier, vive en Finlandia y podrá optar por la doble nacionalidad.
“Tiene unos ojos azules preciosos y es muy fuerte”, dice orgullosa.
Con Román, un bisniesto hoy ya de 17 años, sufrió un accidente en el país del norte cuando una camioneta les pegó por detrás y ambos, con todo y auto, fueron a parar a un río cercano.
El pequeño, de entonces unos tres años, recuerda Evangelina, estaba arriba de una de las llantas vista al cielo, gritándole que se acababan de caer al agua.
“Decía, ¡nos caímos al río!”, narra la entrevistada. Su nieto Arturo era quien no pensaba en su abuela como la voz de “La Cenicienta”, película animada de los estudios Disney.
“Decía que no podía serlo porque estaba muy viejita”, cuenta.
“Entonces empecé a tocar la guitarra y a cantarle las canciones de la película y por fin lo aceptó. Me dijo: bueno, puede ser que tú seas ‘La Cenicienta’”, detalla la actriz.
De su nieto muerto hace 10 años, dice que era un chico sensacional que estudiaba Teología.
Fue muerto, por otro joven, luego de un incidente en auto.
“Ser mamá es lo máximo, pero ser abuela es más suave. La abuela disfruta realmente todo porque ya no tiene la responsabilidad de ser mamá o papá sino que sólo es gozo”, declara Evangelina Elizondo.
“Sí soy consentidora, a uno de mis nietos, su mamá, le decía que yo no le regalaría nada porque se portaba mal. Y yo le dije: dile que sí te voy a dar y que ella no tiene por qué decirme qué hacer”, cuenta entre risas.
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