Profepa vigilará el cumplimiento de la Ley en caso de río Sonora

México, D.F.-
Como lo instruyó el presidente Enrique Peña Nieto, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) permanecerá pendiente de que se remedie hasta el último daño causado por el derrame de Sulfato de Cobre Acidulado.

El titular de dicha dependencia, Guillermo Haro Bélchez, visitó la entidad como parte de la Comisión Especial designada para revisar y atender la necesidades que prevalecen tras el derrame de 40 mil metros cúbicos de lixiviados de dicha sustancia en el Río Bacanuchi.

Destacó que la Profepa ha actuado desde antes y que lo seguirá haciendo como integrante de esa comisión, durante el seguimiento de la reparación del daño y la atención a las personas afectadas por ese accidente.

En rueda de prensa, el funcionario federal aseveró que continuarán los procedimientos administrativos abiertos a la empresa, lo que significa coadyuvar con el Ministerio Público en la integración de la denuncia penal correspondiente y la eventual consignación de los responsables.

Además, señaló que estarán atentos a la información que el congreso federal solicite sobre el caso, dijo que se han dado respuestas puntuales a las inquietudes de los legisladores a través de las Unidades de Enlace de la Secretaría de Gobernación.

Haro Belchés aseguró que continuará la supervisión de la Mina Buena Vista del Cobre, al igual que los más de mil 252 yacimientos que existen en 14 entidades de la República Mexicana.

Subrayó que luego de establecer las dos clausuras a los patios de lixiviación de la minera responsable y aplicar las primeras medidas y sanciones por el accidente, el siguiente paso de la Profepa es vigilar su cumplimiento.

Se abocarán a la neutralización del cauce, a la recolección del producto, la limpieza del río y a analizar las características del suelo, así como a diagnosticar el estado en que se encuentran las zonas afectadas.

Lo anterior tiene el propósito de hacer el nexo causal de cómo se encontraba y como quedó, y con base en ello dimensionar la atención inmediata con recursos para remediar el daño o compensarlo con otras acciones.