Washington, D.C.-
El presidente estadounidense Barack Obama salió hoy al paso de los llamados de legisladores para imponer una prohibición de viajes desde Liberia, Guinea y Sierra Leona, y aseguró que, según expertos, esa medida podría ser contraproducente.
“Si instituimos una prohibición de viaje que sustituya los protocolos que tenemos en vigor ahora, la historia muestra que hoy hay una mayor probabilidad de incumplimiento”, dijo Obama a periodistas en la Oficina Oval de la Casa Blanca.
El mandatario sostuvo una reunión con su equipo médico de seguridad nacional, incluida la secretaria de Salud, Sylvia Burwell; el director del Centro para el Control de Enfermedades (CDC), Thomas Frieden, y la asesora de Seguridad Nacional, Susan Rice.
Legisladores estadounidenses pidieron este jueves imponer una prohibición de viaje a todos los pasajeros procedentes de los tres países más afectados por el virus del Ébola.
Pero Obama señaló que en prohibiciones similares, la gente no ha divulgado voluntariamente su información o pueden hacer lo que se llama un viaje “en pedazos” para ocultar que han estado en uno de esos países.
“Como resultado es posible que terminemos recibiendo menos información de quién tiene la enfermedad, que haya menos probabilidad de ser tratado, monitoreado apropiadamente o puesto en cuarentena y, como consecuencia, es posible que terminemos teniendo más casos”, dijo.
“En este momento la opinión de todos los que han estado involucrados en esto es que una prohibición de viaje no es la salida apropiada”, sostuvo Obama.
No obstante, el presidente señaló que si sus expertos le hacen recomendaciones diferentes las tomará en cuenta.
Antes de la reunión sobre el ébola, el mandatario notificó al Congreso sobre la activación de elementos de la Guardia Nacional para apoyar al contingente de soldados que ayudarán a contener la enfermedad en África.