México, D.F. / Abril 2.-
El sueco Sven-Gor„n Eriksson dijo que se va frustrado por los resultados obtenidos como técnico de la Selección Mexicana de Futbol e indicó que es una cuestión de mentalidad el hecho de que los tricolores disminuyen su rendimiento fuera del Estadio Azteca.
El presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), Justino Compeán informó por la mañana al estratega europeo de que ya se había acabado su ciclo con el Tricolor.
“Lástima porque a mí me gustó el trabajo, me gustó todo el país, muchas gracias a todos los jugadores que convoqué, muchas gracias a la Federación que siempre me apoyó, claro que entiendo que más tarde o más temprano la paciencia se acaba”, dijo el técnico que tuvo
cursos intensivos para hablar un mejor español.
Luego deseó “mucha suerte al país, a la Federación y a los jugadores para los próximos partidos de calificación y estoy cierto que México va calificar al mundial”.
Eriksson deja a la representación nacional en cuarto lugar en la clasificación del hexagonal de la Concacaf que otorga tres boletos y medio para la Copa del Mundo Sudáfrica 2010, luego de un triunfo en casa por 2-0 sobre Costa Rica y caídas de visita por 2-0 ante Estados Unidos de Norteamérica y 3-1 frente a Honduras, este último ayer por la noche en San Pedro Sula.
Cuestionado de qué le falta al futbol mexicano para evitar ese tipo de actuaciones y posicionarse mejor en el plano mundial, respondió que “poco o nada, porque el futbol mexicano es fuerte, el futuro de México es bueno, México tiene jóvenes talentos y tal vez no
están listos (en este momento)”.
De su estado de ánimo al momento de dejar al Tricolor afirmó que “claro que frustrado por los resultados, pienso que ayer pude ganar el partido, entonces las reglas del futbol son muy claras, claro que quería llegar al final del contrato hasta el mundial”.
Un tema insistente en las preguntas de los reporteros fue la indisciplina de la que tanto se habló hasta en el último partido de ayer ante los Catrachos.
“Claro que es culpa de nosotros la existencia de muchas tarjetas amarillas y rojas” y precisó que en todas las concentraciones que realizó sólo en una ocasión un jugador llegó muy tarde a la misma, mientras que en las demás algunos convocados lo hicieron un minuto de
retraso pero “eso no cambia la vida”.
De esa supuesta indisciplina y el hecho de que el equipo mexicano no jugó bien fuera de casa, indicó que “si alguien tiene que pagar soy yo”.
Y luego precisó que “es cuestión de mentalidad” el hecho de que no tenga el mismo desempeño en cancha ajena. Es más, en una conferencia dada el año pasado expresó que los mexicanos “tienen miedo” de jugar en otro escenario que no sea en casa.
Remató con que “a mí me gusta el futbol mexicano, a mí me gusta todo, lo único que no me gusta en esta ciudad es el tráfico” y declaró que “el jugador mexicano tiene una actitud de trabajo fantástica”.
Discussion about this post