Guadalajara, Jal.-
Un regaño prolongado. Dos horas de plática para “apretar tuercas” en el Rebaño.
Fue una larga charla la que sostuvieron este miércoles los integrantes del plantel de las Chivas del Guadalajara con el cuerpo técnico que encabeza José Manuel de la Torre y el presidente del club, Néstor de la Torre, en las instalaciones de Educare, escuela propiedad de Jorge Vergara.
El 5-0 sufrido frente a Santos Laguna, en cuartos de final de la Copa MX, provocó una sacudida que no estaba prevista. El Guadalajara, que acaba de cambiar su estructura directiva, se vio en la necesidad de reunir a sus jugadores durante cerca de 120 minutos antes del entrenamiento de este miércoles en Verde Valle, que duró apenas 50 minutos.
José Manuel de la Torre, nuevo entrenador del Rebaño Sagrado, poco quería hablar sobre la larga plática, pero al final, terminó por reconocer que quería saber el sentir de sus futbolistas para, a partir de ahí, empezar a tomar medidas que permitan corregir de inmediato el rumbo del club, que además de estar eliminado en la Copa MX, se encuentra cada vez más cerca del descenso.
“Sí, son las pláticas que se pueden tener con un grupo que se quedó a trabajar para recuperar ciertos aspectos. Son situaciones que se presentan con todo el grupo, con la directiva, que teníamos que hablar sobre lo que estamos viviendo, cómo se sienten y todo esto que es importante”, afirma de inicio.
“Es parte de cerrar filas, me refiero a lo que siente el jugador dentro del campo, lo que está sintiendo desde nuestra gestión. Todo había que platicarlo con ellos, sentirlos para seguir apretando tuercas por todos lados”, añade el estratega del chiverío, que lleva dos derrotas en sus primeros dos encuentros al frente del equipo, uno de Liga y uno de Copa MX.
Ante la escuadra lagunera, ‘Chepo’ determinó utilizar un cuadro plagado de suplentes, a pesar de que el conjunto local hizo uso de sus titulares. El resultado fue una estrepitosa caída, con una pésima actuación del equipo tapatío. Pero a pesar de todo, el entrenador rojiblanco intenta mantener la confianza entre sus jugadores.
“No me decepcionó. No estoy decepcionado de ellos. Algunos no están en su mejor nivel y no lo digo yo, lo dice la competencia que ha tenido Chivas. Buscamos ponerlos en su mejor nivel pronto para que podamos rescatar puntos. Por eso son las pláticas con ellos, para sentirlos, qué están sintiendo, qué les pasa por la cabeza y de ahí optar por lo mejor, con quiénes vamos a trabajar para poder rápido, lo más pronto posible, apretar tuercas y lograr los puntos que queremos”, sentencia.
A José Manuel de la Torre le tocó vivir, como futbolista, una etapa exitosa de Chivas. Fue campeón en la temporada 1986-87, pero ahora, como entrenador, tiene el difícil compromiso de salvar al Guadalajara del descenso.
“Chivas viene hace tres años en descenso y lo han enfrentado con muchos jóvenes, sin el arropo de gente de experiencia. No es lo mismo dar la responsabilidad a un joven que tener a siete experimentados”, apunta.
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