Reynosa, Tamaulipas / Abril 23.-
Bajo un intenso calor de 36 grados centígrados, Alfredo Castillo, como dijo llamarse un indigente de Matehuala, San Luis Potosí, quedó abandonado sobre la vía pública en la colonia Doctores, junto al canal Rodhe la tarde del miércoles, sitio hasta el que al parecer llegó por su propio pie para luego caer enfermo.
En posición fetal el hombre de macilento aspecto ha permanecido más de 15 horas, sin recibir atención médica, abatido sobre el suelo. En aparente estado de deshidratación, los lugareños afirmaron que le vieron comer incluso, hierba seca y moverse sobre sus rodillas sobre la carpeta asfáltica sin rumbo fijo y peligrando a ser arrollado.
Algunos transeúntes y automovilistas se detuvieron a prestarle auxilio y llamaron a la Cruz Roja para que trasladaran al vagabundo, pero éstas nunca arribaron.
En sus ojos rojizos y espalda con llagas, las huellas del abandono eran más que evidentes. Reyna Arellano, presidenta de la colonia, afirmó que es la primera vez que se le ve por el solitario rumbo, a unos 300 metros de la calle Rosalinda Guerrero.
Con esfuerzo, el menesteroso balbuceó que no tenía hogar ni familia. Agregó que le dolía el estómago.
Entre la gente que se detuvo para ayudarle, Pedro Iracheta y Carlos García, músicos del trio Los Leos, le compraron pan y refrescos, que a su boca -escondida por una larga barba blanca- le acercaron. Por su expresión aparentaba que le sabían a “gloria”, dijo uno de los jóvenes ahí reunidos.
La gente se fue retirando al tiempo que se acercaron más curiosos, pero no fue el caso del servicio médico comunitario, que dejó al desmejorado indigente a su suerte, a la intemperie.
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