TELMEX y la basura telefónica

¿Cuántas veces se ha despertado durante una siesta por el sonido insistente de su teléfono?
Seguro usted amable lector, ha vivido esa experiencia y la verdad es de lo más desagradable levantar el aparato telefónico para escuchar una voz amable que se disculpa por haberle interrumpido y a continuación sin respirar, empieza una letanía donde usted, sólo está esperando un momentito para interrumpir y decir, “no gracias, no quiero crema para rasurar la zona del biquini” o “no gracias, no me interesa asegurar mi refrigerador viejo”.
¿A poco no le ha pasado? A veces hasta casi nos caemos pensando que se trata de una llamada importante para que, ¡oh desilusión!, sea una grabadora avisándole que ya se le va a vencer el pago de teléfono, o para decirle que ya se le venció o para recordarle que tiene que pagar porque lleva dos meses sólo recibiendo llamadas.
Y más nos enojan esa clase de llamadas cuando las hacen al teléfono celular y usted no se encuentra en su ciudad, ¡peor, está de vacaciones en Estados Unidos! Y ni modo, como pensó que se trataba de una emergencia contestó, y ya por ese simple detalle tiene que pagar un dinero extra por llamada internacional.
Pues bien, como la llamada “spam” o basura telefónica está inundando todos los países, España prepara una ley que esperan aprobar a fines de este año donde se considerará competencia desleal que las compañías usen las listas de teléfonos y los correos electrónicos para promover sus servicios y productos.
Los españoles esperan que esa ley sea aplicable en todos los países de la Comunidad Económica Europea, porque al igual que los mexicanos, están hasta el chongo de llamadas inoportunas y fastidiosas, sobre todo porque los españoles podrán no ir a misa, pero no perdonan la hora de la siesta y es en ese momento, cuando más los molestan.
De acuerdo a la nueva ley, realizar propuestas no solicitadas y reiteradas por teléfono, fax, correo electrónico u otros medios de comunicación a distancia se considerará una actividad comercial desleal y agresiva, y las empresas que incurran en esto serán sancionadas, ya sea con una multa o el cese de sus servicios.
¿Se imagina usted que en México se creara una ley parecida? Pues entonces adiós Carlos Slim, porque Telmex es una de las empresas que más incurren en esta práctica, que a todas luces es desleal porque se aprovecha de que tiene a su merced a casi el 100 por ciento de los hogares y empresas mexicanas.
Y entonces usa las redes para ofrecer toda clase de servicios, como por ejemplo el seguro para su casa, por si se le descompone algo, y lo proporciona Inbursa, el problema está que cuando quiere cancelarlo, no hay poder humano que lo logre.
Algo similar pasa con los servicios bancarios, los bancos también abusan de esas llamadas y cada vez que pueden insisten tanto que se les puede acusar de acoso telefónico.
Por lo pronto el gobierno español ya mandó una carta a las seis empresas telefónicas para exigirles que cesen esas prácticas porque vulneran los derechos de los consumidores.
Aquí en México no tienen que hacer seis cartas, con una sola que le manden a Slim es suficiente, para que obligue a sus empresas o socios a que se limiten a anunciar sus productos sin interrumpir el bendito descanso de sus contribuyentes que cada día los hacen más ricos.
La nueva legislación surge en España porque todos los días aumentan las quejas de los consumidores contra esa clase de publicidad, y aunque no hay cifras oficiales que determinen cuántas llamadas y correos basura se producen diariamente, el número de quejas en España se ha incrementado sobre todo el último mes y medio.
Nuestros legisladores si realmente quieren hacer algo por sus representados no está de más que tomen el ejemplo de España y hagan algo por la tranquilidad de los ciudadanos, en vista de que no pueden darnos la seguridad que nos merecemos y por la que pagamos con nuestros impuestos, pues por lo menos obliguen a las empresas telefónicas y bancarias a que nos dejen en paz.