Londres, Inglaterra / Mayo 6.-
Las operaciones militares contra la milicia talibán en el norte de Pakistán dejaron hoy más de un centenar de muertos, entre ellos unos 30 civiles, mientras que miles de personas continúan abandonando la zona ante los cruentos combates.
Las fuerzas de seguridad paquistaníes informaron que al menos 77 militantes fueron abatidos en el distrito de Buner, en el valle de Swat, en el marco de las operaciones para liberar la zona, que controlan desde hace meses el talibán paquistaní.
Ante el aumento de la inseguridad en el Valle de Swat, principalmente en el distrito de Buner, que fue tomado por combatientes del Talibán la semana pasada, el ejército lanzó una ofensiva para controlar la situación.
En un comunicado, el Ejército explicó que en la ofensiva para expulsar a los milicianos de Buner, a unos 100 kilómetros de Islamabad, también fallecieron cuatro soldados y algunos civiles, sin precisar el número exacto.
El canal de televisión privada Daw, informó sin embargo que entre 30 y 34 civiles habrían fallecido en las últimas horas en los combates entre la insurgencia y las fuerzas de seguridad en el Valle de Swat, en Buner y la vecina localidad de Mingora.
Los combates, que ha obligado el desplazamiento de miles de familias, se han extendido a varias zonas del montañoso Valle Swat, fronterizo a Afganistán, pese el alto al fuego que existe en la zona desde febrero pasado.
De acuerdo con el reporte de la televisora paquistaní privada, la milicia talibán tiene aún bajo su control importantes zonas de Swat, y ocupadas varias oficinas públicas, comisarías de la policía, museos y la sede del gobierno local.
A poco más de una semana del inició de la ofensiva, al menos 350 personas han muerto, cerca de 400 mil habitantes han sido obligados a abandonar sus hogares en busca de lugares más seguros, mientras que miles más están atrapados en medio de los combates.
En medio de fuego cruzado, decenas de niños de un orfanato se encuentran prácticamente atrapados con el riesgo de morir, debido a que los techos del inmueble han sido tomados por los soldados paquistaníes para combatir desde lo alto a los talibán.
“Hasta ahora los talibanes no han disparado contra el edificio, pero esto puede ocurrir en cualquier momento”, indicó Mohammad Ali, administrador del orfanato en un llamada telefónica al canal Daw para denunciar lo sucedido.
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