El trance que viven dos reporteros de la empresa MVS que se unieron a un proyecto que busca detectar, investigar y exponer actos de corrupción y que por ellos fueron dados de baja de su trabajo, pone el tema en la mesa, con la pregunta para los dueños y dueñas de empresas de medios de comunicación, sobre qué es lo que buscan a través de éstas, hacer periodismo o hacer dinero.
La crisis de inseguridad que se vive en el país ha replanteado el papel de los medios de comunicación que han optado en prácticamente todos los casos guarder silencio en torno a este tema, lo que lleva a cuestionar su papel en la sociedad mexicana.
La inseguridad lleva a otros temas como la impunidad y la corrupción ligados a una descomposición que provoca un silencio que no le hace bien a nadie.
MVS prohibió literalmente alianzas con otros medios que signifiquen poner al servicio de proyectos de investigación independientes a parte del personal adscrito a su nómina.
Recuerdo que trabajando en un medio impreso de Nuevo Laredo cuando algún reportero exponía un tema que lesionaba los intereses de esa empresa periodística uno de los dueños salía a decir: “Cuando tengas tu periódico escribes lo que quieras”.
En estos tiempos pareciera que es imposible conciliar informar con mantener a flote un medio de comunicación, las presiones para guardar silencio son reales, los periodistas están bajo vigilancia constante y el desánimo es evidente reflejándose en la calidad de la información que se publica.
En estos tiempos trabajos de investigación periodística con la calidad requerida son muy escasos, algunos que hemos visto publicados a difundidos a nivel nacional provienen de filtraciones informativas, más que un trabajo serio de búsqueda de información confiable que ayude a recomponer el desastroso estado de este país.
Tal es el caso de la revelación de la casa blanca propiedad de Angélica Rivera.
Los intereses en pugna que existen en México limitan la práctica periodística, y ello permea en todos los niveles de gobierno.
Las trabas para ejercer un periodismo que denuncie malos manejos es algo impensado, y si se logra exponer casos de corrupción a quienes resultan responsables no se les toca ni con el pétalo de una rosa.
Pero eso sí el medio que lo publica y los trabajadores son sujetos de presiones que evidencian el lastre que se tiene en el país
Por ello no nos extraña que la empresa MVS haya decidido imponer un decálogo de comportamiento a su personal para eliminar la posibilidad de alianzas con otros medios que signifiquen un trabajo serio de investigación periodística.
La alianza de medios conformada por Animal Político, Emeequis, Másde131, Periodistas de a Pie, PODER, Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D), Revista Proceso y Unidad MVS/Aristegui, que lanzaron MéxicoLeaks el martes 10 de marzo pasado, dio como resultado el decálogo y la baja de dos reporteros de MVS.
Viendo lo anterior hace falta un replanteamiento del trabajo que se realiza en las redacciones, aprovechar asimismo los cambios de gobierno para replantear también el respeto irrestricto a la libertad de prensa.
Fortalecer el desarrollo de investigaciones periodísticas que contribuyan a sanear el estado de cosas que vive el país y los dueños de medios de comunicación que no le entienden al periodismo pues que se dediquen a hacer otra cosa, porque esta profesión requiere de algo más que buscar ganancias, también tiene entre sus fortalezas contribuir a crear mejores sociedades.
Y FRANCISCO HABLÓ… OTRA VEZ
“En sus nuevas declaraciones, este viernes, el Papa considera que la violencia mexicana no se puede atribuir simplemente a errores del Estado: “¿Quién tiene la culpa? ¿El Gobierno? Esa es la solución, la respuesta, más superficial”, dijo Francisco. “A México el diablo lo castiga con mucha bronca”, añadió.
Jorge Mario Bergoglio llamó a los mexicanos a “poner el hombro” en la lucha contra el crimen organizado, aunque reconoció lo delicado de la tarea: “Yo sé que es difícil denunciar a un narcotraficante, porque lleva la vida, o es una especie de martirio”, extractos de la nota publicada en el periódico español El País.
Correo electrónico: derrotero@hotmail.com
Twitter: @derrotero_mx
Discussion about this post