Implacables redes sociales

No los spots radiofónicos, ni los televisivos, no los espacios en la prensa escrita, sino que serán las redes sociales, el pueblo en sí, sin ataduras, el que pondrá a los 11 candidatos locales a diputados federales en su verdadero y bien merecido lugar.

AHÍ SE DECIDIRÁ
Este fenómeno de comunicación social marcará la pauta sobre quién debe ganar, influirá en muchos votantes que aún no tengan decidido a quién otorgar su sufragio, en los indecisos, les afectará lo que lean. Y si mucho nos apuran, lo plasmado en las redes sociales incidirá rotundamente en el resultado.

QUIEN GANE AHÍ, GANA TODO
En mucho, los comentarios sueltos en twitter, facebook y otros sitios electrónicos de su tipo encaminarán al pueblo a decidirse, la labor de tales redes, lo que vaya surgiendo en las mismas, lo que nuestra gente hable, lo que el pueblo vaya insertando en estos escaparates será lo que marque ese resultado que se dará y conocerá en la tarde-noche del domingo 7 de junio.

EL PUEBLO NO PERDONA
Lo demás son falsedades, el proselitismo, la parafernalia de los candidatos, definitivamente que no harán mella en el derrotero. Hoy y hasta el mero día de los sufragios, lo que el pueblo diga en tales espacios cibernéticos será el fiel de la balanza. Porque ahí no hay compromisos, ni caben las falsas poses de nadie.

GATOS DE PAGA, SE NOTARÁN
Y los candidatos, los partidos, el gobierno que apoye a estos, podrá poner a un ejército de muchachitos a llenar tales espacios electrónicos con zonzera y media, pero el ciudadano no se traga esas mentiras, el pueblo sabe por dónde masca la iguana, detecta de inmediato si es un ciudadano ajeno a cualquier partido o si se trata de un muchachito contratado para subir imbecilidades a favor de cierto candidato, o bien, echar pestes contra el rival de quien le paga.

¿DE A CÓMO LA COMPARSA?
Queridos lectores, ¿Cómo para de a cuánto les gusta que estén cobrando los candidotes-comparsa, ésos que “desinteresadamente” decidieron participar esta vez, aún sabiendo que ni matando a los otros 10, podrán ganar la elección?

MERCENARIO SHALAQUEADO
Por ejemplo, hay un candidote, que va en su tercer partido político (se nota la convicción que tiene por un credo político, por unas siglas y unos colores, ¿no?) El bato busca el billullo grande, ese que le asegure todo el Just For Men, la Henna, el Miss Clairol, que requerirá por lo que le queda de vida (o de cabello), para no volver a lucir una cana jamás.

EL PROFE BAQUETAS
Otro va de abanderado por el gremio de los “pobresores” (pobres los que no supieron combinar el gis y la grilla, pues el bato se la ha vivido sin chambear toda su vidorria gracias al sindicalismo charro). Bueno éste mono va de candidote de los “magisters”, pero le vale el ridículo, él por lo que va es por la feria y una plaza más que le han de haber prometido por prestarse a tal jalada.

LA NENITA DE PAPI
Haciendo sus pininos, surge la nenita de papi chulo. No le aunque que no va a ganar, eso no importa, Abraham Lincoln perdió más de seis veces y miren a donde llegó. La cosa es estar en la jugada, para cachar aquí, capotear allá, así se curten las baquetas.

DOCTOR CEREBRO, VÍCTIMA
“Nadie me entiende, soy un incomprendido y los que más o menos mastican el rollo que les aviento, pues de plano no me tragan, no les conviene y por eso se les hace fácil tildarme de Lorenzo de Monteclaro, dicen que no me llega suficiente agua al tinaco y que se me vuela mucho la huila”. Dicen que dice un pobre y simpático hombrezote, que en el fondo, es un bebé.

ECHÉNLOS EN UNA LICUADORA
Hipotéticamente hablando –aunque ese sería nuestro firme deseo en esta temporada electorera-, ¿Qué pasaría si echaramos a los 11 candidatos a diputados federales en una mega licuadora? ¿Obtendríamos algo bueno entre todos? ¡Y nada tú, que nos resulta otro Glafiro Salinas!, No, manito, mejor ahí la dejamos. Jodidos ya estamos, para que búscarle tres pies al gato.

WALKING DEAD
Y que no saca una flatulencia cuadrada, el toparnos en la calle al secre estatal de salud. Chi mai que el tal “Normuerto” Treviño García Manzo le pega un susto al más curado de espanto. Se nos vino a la cabeza el actor Germán Robles, haciéndola de “El Conde Drácula”, esa peli, que solo nos chutábamos si estábamos enredados en las enaguas de mamá o pescados de las pantorrillas de papá.

¡ESTÁ VIVO, ESTÁ VIVO!
No sabemos a qué vino, ni con qué excusa lo mandó “El Cara de Morsa Tabasqueña”, pero aprovechando el viaje, habría que exigirle que el estado deje de hacerle al pende…nciero con lo del hospital oncológico, el que está a medias, le falta mucho para operar bien.