REYNOSA, TAM.- Una joven estadounidense que forcejeó con su pareja con un cuchillo cebollero luego de que aquel la agredió verbal y físicamente por celos, acabó privándolo de la vida al enterrarle el arma blanca en la pierna izquierda y perforarle la vena femoral.
Luego de que la mujer de 19 años pudo vencer a su hombre de 21, quien era empleado en una gasolinera, salió de la casa que cohabitaban ubicada en la colonia Villas Diamante, y aparentemente sin saber que lo había herido de muerte, y pensando en ponerse a salvo, se alejó del sitio.
Sin embargo cuando la mujer identificada como Jazmín Isabel Rivera regresó a la casa, encontró derribado y en un charco de sangre a su hombre, identificado como Erick Pérez Rodríguez, quien era originario de Cosomaloapan, Veracruz, y con quien ella ya había vivido durante más de un año en su natal Houston, Texas.
Jazmín Isabel pensó que su pareja aún estaba con vida y solicitó la ayuda de Protección Civil, pero minutos después los socorristas confirmaron que ya había perecido.
El crimen ocurrió ayer alrededor de las 9:30 horas dentro de la casa donde víctima y victimaria vivían juntos desde hace un par de meses, ubicada en la calle Circuito Laguna Santa María número 153, de la colonia Villas Diamante.
Cabe señalar que la mujer dijo que ella sólo se defendió del ataque.
“Yo no quise matarlo, el se me fue con el cuchillo, forcejeamos y él se lo enterró”, dijo la joven mujer entre sollozos.
De acuerdo con la primeras investigaciones de los agentes de la Policía Federal comisionados en la brigada de homicidios, alrededor de las 9:15 de ayer Jazmín Isabel Rivera, quien llegó procedentes de Houston en febrero pasado, salió del baño luego de ducharse y se cambió para ir aparentemente a la tienda.
Cuando Erick, quien conoció a Jazmín cuando él estuvo de ilegal an aquella ciudad texana notó que su mujer se estaba arreglando y perfumando, le reclamó el esmero que le ponía a su arreglo personal y presa de los celos le gritó que a dónde y con quién iba.
Quizás Jazmín lo ignoró o algo le contestó a Erick que éste, preso de cólera fue a la cocina para tomar un cuchillo cebollero con el cual se le fue encima a la que era su amada, quien logro esquivar el frío metal asesino, para luego sujetarlo con sus manos y forcejear ferozmente, hasta que en medio de la batalla ella logró vencerlo.
Las indagaciones revelan que la pareja estuvo forcejando en la sala de la casa y que la mujer hirió al despachador de gasolina cuando estaban recostados en el sillón grande.
Tras herir a su pareja, Jazmín se alejó, mientras que Erick comenzó a sangrar a borbotones, pues la herida la sufrió en la vena femoral, que es una de las principales irrigadoras de sangre del cuerpo.
En cuestión de segundos el despachador de gasolina que también se dedicaba a limpiar vidrios de coches, se desangró, yéndosele la vida en forma irremediable.
El joven Erick apenas pudo ponerse en pie, y agónico salió de la casa donde vivía, dio unos seis y se cayó.
Antes, cuando salió de la vivienda para pedir ayuda, viendo el chisguete rojo que emanaba de la herida que le provocó su mujer, tomó un pantalón de mezclilla precisamente de Jazmín Isabel con la intención de taponearla, pero no pudo.
Las fuerzas se le fueron al joven en afuera de la vivienda y calló entre la banqueta y la hierba crecida del frente de la casa, donde apenas pudo colocarse el pantalón de su amada en la pierna y perecer en medio de un charco de sangre.
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