México, D.F.-
De los 83.6 millones de mexicanos registrados en el padrón electoral, sólo 47% acudió a votar el pasado 7 de junio para elegir diputados federales, y aunque la cifra rompió los pronósticos sobre el abstencionismo, al final cada voto salió más caro.
Lo mismo ocurrió en los comicios estatales. La Unidad de Datos de EL UNIVERSAL hizo un ejercicio en las nueve entidades donde se eligió gobernador, y en el Distrito Federal, para conocer el costo del voto.
En el escenario de que hubieran votado todos los ciudadanos inscritos en la lista nominal electoral, el costo por sufragio rondaría entre 160 y 383 pesos, pero en las entidades donde se registró mayor renuencia para ir a las urnas el gasto se triplicó, al superar los 900 pesos por cada voto.
Ese fue el caso de Baja California Sur, con una participación electoral de 54% de su padrón. En un escenario ideal, donde todos los sudcalifornianos hubieran acudido a las urnas, el costo de cada sufragio hubiera sido de 375 pesos, pero el abstencionismo hizo que la cifra creciera hasta 911 pesos, por lo que se ubica como la entidad con el mayor aumento de entre las 10 analizadas.
En el caso del Distrito Federal, el abstencionismo alcanzó 60% y cobró una cara factura. El costo real del voto pasó de 213 pesos (si hubiera habido 100% de participación) a casi 550 por cada sufragio emitido.
Para realizar este cálculo se dividió el presupuesto destinado a cada instituto electoral en las entidades entre el número de ciudadanos que votaron.
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