Monterrey, N.L. / Junio 2.-
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Policía Federal y la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) detuvieron a 32 uniformados de corporaciones policiacas de Nuevo León, en cumplimiento de órdenes de aprehensión y de arraigo otorgadas a la Procuraduría General de Justicia (PGJ).
El operativo conjunto entre autoridades estatales y federales inició a las 8:00 horas del lunes, cuando de forma simultánea tomaron las secretarías de Seguridad Pública de Monterrey, San Nicolás —gobernados por el PAN— , Apodaca —de gobierno priísta—, y del estado.
En las movilizaciones que duraron poco más de ocho horas, las fuerzas militares y federales concentraron en sus respectivas corporaciones a los 3 mil 400 policías, les pasaron lista y procedieron a desarmarlos.
Luego los militares ejecutaron órdenes de aprensión y de arraigo para 32 uniformados, de los cuales dos pertenecen a la corporación de San Nicolás, ocho a Monterrey, 13 a Apodaca y nueve a la estatal, según reportes policiacos hasta el cierre de la edición.
Las detenciones no se limitaron a policías rasos; del número total, 10 son comandantes o jefes de grupo y hay un jefe de operaciones detenido.
De acuerdo con datos vertidos por militares y el gobierno nuevoleonés, esta acción busca desmantelar una red de protección que estructuraron grupos del crimen organizado en complicidad con policías locales.
Esta red, dijo el gobernador Natividad González Parás (PRI), se ha evidenciado en diversas detenciones de la Sedena, donde policías municipales o estatales han ayudado a proteger o escapar a presuntos narcos, al momento que el Ejército ya los tiene copados.
“Son acciones que tiene como propósito realizar investigaciones y esclarecer la participación de elementos de seguridad pública municipal y estatal con el crimen organizado”.
“Éste es un operativo que surge en razón de los programas de coordinación que hay entre el ámbito federal de gobierno, donde el Ministerio Público estatal está participando; son operativos que no se realizan por primera vez en el estado de Nuevo León, ya se han dado en otras ocasiones”.
El secretario de Seguridad Pública, Aldo Fasci Zuazua, aseguró que las detenciones continuarán en próximos días y podrían ampliarse a otras corporaciones policiacas.
De acuerdo con información del Ejército, proporcionada a EL UNIVERSAL, en dos “narcolistas” encontradas en operativos recientes se señalan nombres, cargos y montos de pago a policías, a cambio de protección o servicios fuera de sus atribuciones.
Familiares protestan
Al menos unas 60 personas, quienes se identificaron como familiares de los policías detenidos, se manifestaron frente al cuartel general de la SSPE, ubicado sobre avenida Félix U. Gómez, en la colonia Moderna.
Principalmente mujeres con niños en brazos, gritaron consignas contra las fuerzas
castrenses, bloquearon el acceso lateral de vehículos oficiales a la corporación y exigieron la presencia del gobernador Natividad González.
La protesta inició cerca de las 11:00 horas de este lunes, a casi tres horas de iniciado el operativo federal para detener policías presuntamente cómplices del crimen organizado.
Al ser entrevistados, las mujeres y los jóvenes aseguraron que esto es parte de un “hostigamiento” en contra de los policías por parte del Ejército.
“La corrupción viene desde arriba, que empiecen en las cabezas y luego que sigan con los de abajo, los gobernantes aquí son a los que tienen que darle la cuota a ‘Los Zetas’ y ellos son los que también están vendidos”, aseguró una de las manifestantes que rehusó dar su nombre o el de su supuesto esposo.
Las mujeres y los jóvenes que protestaron advirtieron que no se retirarían hasta que fueran liberados sus parientes; sin embargo, para las cuatro de la tarde ya se habían ido.
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