Mientras la nación sufre quebrantos los mexicanos todos lo padecemos, ocurre lo mismo a los partidos políticos, a Morena no sé porqué se le dio espacio, PRD lucha por su permanencia fracturado por los mismos defectos de todos los establecimientos monárquicos.
PAN está desecho por el bisoñés de su presidente, que sin esfuerzo logró dividir en diminutas fracciones a su partido, tirando cada una para su lado, porque postula delincuentes a cargos de elección popular, hoy de gran peso, busca obtener diputaciones, alcaldías, gubernaturas o “lo que haya por competir”, aunque sea con delincuentes documentados, sin importar el caso se trata de competir con o sin razón.
El Revolucionario no está exento y las parcelas de poder otrora intocables, se volvieron frágiles. Ahora se busca quién suma, no divida, que sea un imán, que allegue votos pues su carencia equivale a la pérdida de espacios y nadie quiere perderlos.
El electorado está más consciente, se ha tornado más participativo y quisquilloso, demostrando al poder central la necesidad de elegir candidatos ágiles, frescos, que oferten algo, participativos que sumen inteligencia, conocimiento y sensibilidad política, “el dedo ungidor” ahora le pensará dos veces -quizá más- antes de tomar decisión.
La crisis de los partidos tendrá repercusiones positivas, ya el hartazgo llegó a su clímax, las políticas de antaño ofrecen medias verdades y medias mentiras, llenaron el saco de piedritas a todos los mexicanos, aquellos que vemos y sentimos que una escasa minoría se queda con los haberes del pueblo y los más, sólo hay hambre y escasez.
Esa crisis evidente demuestra la flaqueza del sistema y la falta de inteligencia de quienes nos gobiernan, por ello la elección que se realizará el 5 de junio próximo, será decisiva para el futuro estatal y nacional.
De ahí que la selección de alcaldes considero debe ser meditada meticulosamente por los dirigentes políticos, para ofrecer a su mejor candidato. Como es sabido las crisis son catarsis para crear nuevos aliños políticos, oxidados por la indiferencia, la incompetencia y la codicia. ¡La ciudadanía no aguanta más errores! De eso todos estamos seguros, así que o hay candidatos excelentes, o de plano se pierde la elección.
Curiosamente ayer recordaba a Plutarco Elías Calles, quien en su momento paró en seco todas las guerrillas y asonadas, creó entre otras cosas el Banco de México, el Banco Ejidal y Agrícola, la Escuela de Chapingo y el Partido Nacional Revolucionario, predecesor del PRI, así como otras modificaciones hoy vigentes que trajeron prosperidad y rejuvenecieron el futuro de nuestro país.
En aquel momento Plutarco era joven pero de decisión, realizó cambios que hasta hoy perduran. Esos son los jóvenes valores que requerimos, que pedimos a gritos sin ser escuchados, candidatos frescos sin taras o colas que les pisen, los momentos difíciles hay que ¡volverlos fáciles!
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