Roma, Italia.-
Las votaciones en el Senado italiano de la iniciativa de ley que prevé reglamentar las uniones entre personas del mismo sexo fue suspendida hoy tras la falta de acuerdo, luego que el opositor Movimiento 5 Estrellas rechazó su aprobación a través de una praxis de aceleración de los trabajos.
Las votaciones recomenzarán este miércoles por la mañana, mientras la sesión concluyó ésta tarde en medio de insultos entre los parlamentarios de varios partidos.
La suspensión fue solicitada por el opositor partido Izquierda, Ecología y Libertad (SEL, por sus siglas en italiano), en respuesta al anuncio del Movimiento 5 Estrellas de que no habría aprobado el llamado “supercanguro”, praxis a través de la cual las enmiendas a la iniciativa son agrupadas por tema y votadas para acelerar los trabajos.
Mediante el “supercanguro” se pretende superar el obstáculo representado por las más de cinco mil 500 enmiendas a la iniciativa de ley presentadas por la Liga del Norte con la abierta intención de evitar su aprobación.
Denominada “Cirinná”, por el apellido de la parlamentaria del gubernamental Partido Democrático (PD) encargada de su redacción, la iniciativa de ley es rechazada por partidos de derecha y organizaciones católicas al considerar que representa una amenaza a la familia tradicional.
En particular es criticado el artículo de la normativa que contempla la adopción de los hijos del cónyuge y que para sus críticos vulnera los derechos del menor a tener un padre y una madre, y abre la puerta al “útero en renta” o gestación subrogada.
Las votaciones deberían concluir esta semana, aunque el presidente del Senado, Pietro Grasso, confirmó que en caso de que ello no ocurra se proseguirá la próxima.
La iniciativa de ley Cirinná ha sacado a las calles a millones de personas tanto favorables a reglamentar las uniones entre personas del mismo sexo, como a quienes se oponen.
El primer ministro Matteo Renzi recordó que Italia es uno de los pocos países en Europa que no cuentan con una normativa en la materia, aunque enfrenta la oposición en las filas de su propio partido, que incluye una corriente católica.
El año pasado el Tribunal europeo de Derechos Humanos condenó a Italia por no dar reconocimiento legal a las uniones de personas del mismo sexo.
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