Cd. de México.- Apenas comienza su segundo tercio, pero el Clausura 2016 comienza a lucir definido en sus rubros más importantes, como los líderes generales y el descenso.
Resulta poco común que ambos protagonistas del Clásico Joven lleguen en buen momento, lo que otorga mayor grado de interés al cotejo de este sábado en el estadio Azteca.
Pese a las críticas sobre Ignacio Ambriz, las Águilas acumulan tres presentaciones sin caer (dos victorias y un empate), mismo registro de La Máquina en igual número de partidos.
Los jugadores de Tomás Boy han asimilado perfectamente la idea de su entrenador, en la que es fundamental una cualidad por la que el castigado pueblo celeste suspiró durante varios años: amor propio.
Más allá de que sufrieron en las victorias sobre los Jaguares de Chiapas y el Querétaro (las dos por 2-1, en el estadio Azul), los Cementeros –poco a poco- mutan en un conjunto al que le hierve la sangre durante los 90 minutos. Parece que el calificativo “pecho frío” ya no va con ellos. Es la oportunidad ideal para demostrarlo.
Con los azulcrema, sus depredadores no están en buena racha, pero tienen como principal arma la plenitud física, futbolística y hasta mental que muestra Rubens Sambueza, quien –desde hace varios años- es el verdadero motor del equipo. Por primera vez desde que llegó a México (Apertura 2013, con los Xoloitzcuintles de Tijuana), Darío Benedetto no suma anotaciones después de seis jornadas. Oribe Peralta tiene tres, mas ambos están conscientes de que les sobrarán opciones si “Sambu” se encuentra en buen momento.
Las dos unidades que los amarillos (11) tienen de ventaja sobre los azules (nueve) son un aderezo extra.
Para el equipo del “Jefe”, superar a su rival más enconado le ofrecería beneficios anímicos y estadísticos.
Pronóstico: América 2-1 Cruz Azul
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