Río de Janeiro, Bra.–
El voleibol de sala mexicano reapareció en estos Juegos Olímpicos después de 48 años de ausencia y aunque lo hizo con una derrota, el equipo nacional dejó todo en la cancha ante nada menos que el representativo anfitrión.
El experimentado Carlos Guerra comandó al equipo ante Brasil en un repleto estadio Maracanazinho que se entregó por completo a su selección, y que se llevó el triunfo por 23-25, 25-19, 25-14 y 25-18.
Contra todos los pronósticos México se hizo del primer set (25-23) luego de ir al frente la mayor parte del periodo.
En el segundo los locales demostraron sus mejores jugadas para emparejar el marcador 1-1.
El nivel de los anfitriones subió en el tercero cuando se adelantaron 2-1 al llevarse el set por 25-14. El panorama no cambió en el cuarto set cuando Brasil sentenció el juego con parcial de 25-18.
La última vez que México tuvo representación olímpica fue en 1968.