Texas ejecutó hoy mediante inyección letal al reo anglosajón William Murray, por violar y estrangular a una anciana de 93 años de edad, durante un robo en la casa de la mujer en Dallas en 1998.
La ejecución procedió debido a que la cámara de la muerte en la Unidad Carcelaria Walls, en Huntsville, no fue afectada por los extensos apagones que persisten en el área tras el azote el pasado sábado del huracán Ike a las costas de Texas.
De acuerdo con el Departamento de Justicia Criminal de Texas, antes de morir, el reo, de 39 años de edad, reconoció su culpabilidad y pidió perdón “por lo que hice” a dos sobrinos de la víctima que atestiguaron la ejecución.
Murray fue declarado muerto las 18:20 horas de este miércoles (23:18 GMT), ocho minutos después de que se le comenzara a aplicar en uno de sus brazos la combinación de tres drogas letales.
La ejecución fue atestiguada también por su esposa, sus padres y sus dos hermanos, de quienes el reo se despidió diciéndoles: “estaré allá esperándolos a todos, está bien. Dios los bendiga”.
Murray fue sentenciado a la pena capital por la violación y muerte de Rena Ratcliff, quien sorprendió a Murray robando en su casa en la comunidad de Kaufman, Texas, la noche del 10 de febrero de 1998.
La anciana sorprendió al ladrón y lo golpeo con su bastón, lo que enfureció a Murray, quien procedió a golpearla, violarla y luego estrangularla.
En recientes entrevistas de prensa, Murray responsabilizó a su adicción a las drogas, por una serie de robos que cometió en ese entonces, incluyendo el de Rattcliff.
La ejecución de Murray fue la novena que se efectúa en Texas en lo que va de este año.
Texas encabeza por mucho las ejecuciones en Estados Unidos, al haber aplicado la pena de muerte a un total de 414 reos desde que esta entidad reinstaló la aplicación del castigo capital en 1982.
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