Natal, Brasil.-
Goza cada uno de los 60 minutos que dura la práctica de México en la Arena das Dunas. Guillermo Ochoa se siente pleno, cristalizará el sueño que abrazó desde 2006… Y pretende alargarlo durante muchos años más.
Nombrado titular por Miguel Herrera, el ex arquero del América y el Ajaccio realiza un efímero viaje al pasado, aquellos días en los que custodiar el marco tricolor en una Copa del Mundo lucía como una utopía. Hoy es su dulce realidad, la que atesora mucho más, por todo lo vivido.
“Es momento de pensar en el partido de Camerún, en la victoria”, ataja, como lo hace sobre el césped. “Por supuesto que me veo jugando hasta la final, porque queremos llegar. Estamos aquí y vamos a luchar por todo, llegar hasta donde podamos… Y el futuro, ya lo veremos”.
“Ahorita, lo importante es este torneo, aunque la realidad es que es pensando en éste y en el Mundial que viene”, señaló.
Ha padecido demasiado para tener lo que hoy presume. Por fin escuchará los acordes concebidos por Jaime Nunó como uno de los 11 privilegiados que iniciarán un duelo en el máximo evento futbolístico del planeta.
Viajó a Alemania 2006 como tercer guardameta. El objetivo era que se familiariza con el entorno del magno evento. Hace cuatro años lucía como el titular… Hasta que Javier Aguirre se la arrebató para dársela a Óscar Pérez.
En el verano de 2011 se lanzó a la aventura en Francia. Quería terminar de madurar dentro y fuera del campo, mejorar lo que le separaba de la titularidad. Lo logró.
“Claro que valió la pena. No fue fácil, no resultó un proceso sencillo”, asegura. “Una espera larga, pero no me quedé cruzado de brazos, me puse a trabajar, a mejorar y me siento bastante bien, más probado que hace cuatro años”.
Listo para cumplir el reto en “un día importante dentro de mi carrera. Ojalá se pueda dar con una victoria, que es lo que queremos”.
Radiante, confiesa que todavía no dimensiona el paso que dio con sus actuaciones en duelos amistosos y entrenamientos. Lo único que le interesa, por ahora, es cumplir su sueño… Y conciliarlo por las noches.
“Me siento bien, como siempre, con el mismo compromiso, metas”, advierte. “Desde que nos concentramos estoy pensando en jugar y no es momento de decir si ya me cayó el 20; es momento de seguir enfocado en lo importantes, que son estos tres partidos, en especial el primero”.
“Esta semana, después de que supe la noticia, por supuesto que uno duerme más tranquilo. Siempre es mejor dormir pensando en el rival, que en si vas a jugar. Desde el lunes, que fue cuando lo supe, estoy feliz”.
Corona se resigna
El júbilo de Ochoa contrasta con el dolor de su eterno rival deportivo, a quien no le resta más que apoyar al elegido.
“Sabía que se iba a tomar esta determinación. Lo que me llevo es que siempre demostré capacidad cuando estuvo Miguel”, sentencia Corona. “En el momento que se me dio la oportunidad, siempre estuve respondiendo”.
“Estoy con la frente en alto y sabiendo que lo más importante es el apoyo al compañero. Ellos [titulares] necesitan el respaldo de los que estamos fuera”.
Discussion about this post