Washington, E.U.-
Luis Videgaray, secretario de Relaciones Exteriores, expuso en la Casa Blanca a los asesores del presidente Donald Trump la preocupación del gobierno mexicano por la intención de autoridades de EU de separar a las madres e hijos que intenten cruzar de manera ilegal a la Unión Americana, porque representa una clara violación a los derechos humanos.
Recalcó que México decide quién entra y quién no a su territorio, por lo que no recibirá deportados de otras nacionalidades. Videgaray se reunió con el director del Consejo Nacional Económico de la Casa Blanca, Gary Cohn; el asesor de Seguridad Nacional, Herbert Raymond McMaster, y con Jared Kushner, asesor y yerno de Trump.
El canciller aseguró que, ante la muestra de preocupación, la administración Trump todavía “está estudiando la posibilidad y que no es una decisión tomada”.
“El motivo de las reuniones fue específico: expresar al gobierno estadounidense nuestra grave preocupación a la posible política anunciada por el gobierno de Donald Trump de separar a las familias mexicanas a su arribo. Lo hemos expresado al Departamento de Seguridad Interior y de manera directa a la Casa Blanca”.
En conferencia de prensa en la embajada de México en Washington, con el embajador Gerónimo Gutiérrez, Videgaray ratificó su disposición para llegar a buenos acuerdos, pero con respeto a los derechos humanos.