Cd. de México.-
Poco le importa al aficionado mexicano una sanción de FIFA sobre el estadio Azteca. El grito unísono del “eeeeh pu…” se escuchó más de una vez.
Pese a los esfuerzos del sonido local para minimizar el famoso grito, durante el México vs.
Honduras, la asistencia tricolor se enganchó hasta en ocho ocasiones con el guardameta Donis Escober, en cada despeje de meta del catracho.
De tomar cartas en el asunto, FIFA podría castigar a la Federación Mexicana de Futbol con multa y posible veto al Azteca.