Javier “Chicharito” Hernández Balcázar es noticia a cada momento, ayer porque era la figura de la Selección Mexicana y el gancho publicitario de Banamex; ahora porque saldrá del Manchester United, pero siempre por las sumas extratosféricas que arrojan sus contratos, pues ha trascendido que hoy por hoy gana un millón 600 mil pesos mexicanos por semana, ¡y sin jugar!…
Obviamente sus padres, el exfutbolista Javier “Chícharo” Hernández Gutiérrez y Silvia Balcázar se han beneficiado del dineral que gana el joven, pero desafortunadamente en medio de escándalos familiares por supuestamente haber abandonado a doña Teresa Gutiérrez Casillas, abuelita del jugador, quien falleció sin que los millonarios de la familia vieran por ella ni le ayudaran a que tuviera una atención médica adecuada, según queja pública de Teresa Hernández Gutiérrez, la novena de 12 hijos que tuvo la difunta.
Dice la mujer a grito abierto que desde que su hermano era jugador de Tecos de la Universidad Autónoma de Guadalajara y se casó en 1988 con Silvia Balcázar, se acabó la familia unida y ni ganando lo que ganaba “El Chícharo” desembolsó lo necesario para que su madre llevara una buena vida y un final feliz, y menos “El Chicharito”.
Sin embargo, este pleito no asusta porque es lo común entre muchos millonarios del espectáculo como es el caso también de algunos divorciados que son requeridos en los medios por sus parejas para que cumplan con la pensión alimenticia, dados sus sueldos de reyes frente a la “raquítica” aportación que hacen en favor de sus hijos.
Dos de ellos llaman la atención por ser de sobra conocidos internacionalmente: 1.- Marc Anthony sólo le da a su ex mujer la “miserable” cantidad de 150 mil dólares siendo que él gana un millón 200 mil dólares por mes. 2.- Luis Miguel, el cantante mexicano que ofreció soltar 15 mil dólares y no los 60 mil dólares mensuales para manutención de sus hijos de 5 y 7 años que tuvo con la actriz Aracely Arámbula, quien asegura que el cantante mexicano ganó 24 millones de dólares sólo con su gira de conciertos en el 2009 y 2010.
Pero ya ni quién se sorprenda de lo que los espectadores retribuyen a sus “ídolos”, porque es con la compra de boletos para ir a verlos actuar como se dan la gran vida estos millonarios del espectáculo, y si no, que lo diga Alicia Villarreal quien se dio el lujo de comprar una casa de 40 millones de dólares en Denver “porque sus hijos adoran la nieve”, además de que le organizó el 12 de abril una fiesta de 15 años a la hoy joven Melenie que procreó con Arturo Carmona, un vivales que saltó a la fama y a la “bolsa” valido de su matrimonio y divorcio con la bella cantante y luego de sus relaciones que hizo en el medio de la farándula.
Claro que estas “minucias” de inversiones asustan porque, por ejemplo, Celine Dion está vendiendo su casa en 62.5 millones de dólares, pero hay “niditos” modestos en 7.2 millones de dólares y 5.5. millones de dólares y que pertenecen, respectivamente, a Khloé Kardashian y a Kaley Cuoco, en Estados Unidos, donde el octogenario magnate de medios, Rupert Murdoch, se hizo de una “alcoba” que le costó 57.2 millones de dólares.
De ahí que muchos niños, adolescentes, jóvenes e inclusive adultos sueñan con hacer carrera en el deporte y en la farándula para no solamente tener fama de sobra sino para alcanzar el estatus de millonarios, como ha sucedido con pobres diablos sociales de Brasil y de Argentina que, gracias al futbol soccer, se hartan luego de meter dólares al por mayor a sus cuentas bancarias, sin dejar de pensar en los mexicanos que siguen sus pasos en este terreno.
Por algo la revista Forbes México acreditó que en el 2013 Humberto Suazuo, de los Rayados de Monterrey, y Lucas Lobos, de Tigres de la UANL, fueron los dos futbolistas activos mejor pagados con 3 millones de dólares al año el primero, y 2.2 millones de dólares el felino, en tanto que Christian Benítez, ex del América, se embolsó 2.7 millones de dólares el año pasado.
Y si hablamos de deportistas de Estados Unidos, en el futbol americano, en el beisbol, en el basquetbol, en el tenis, etc., y si reviramos con los futbolistas mejor pagados de Europa, como Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, no alcanzan las cifras para aceptar como realidad lo que también ganan muchas figuras de la farándula a nivel internacional, merced a lo ciego que son los que se desviven por comprar boletos para ser testigos presenciales de sus “shows”.
Lo negativo de atragantarse de tanto dineral es el mal ejemplo al que orilla a una persona inmadura, tal como lo hemos visto en el caso del examericanista paraguayo Salvador Cabañas, quien hoy se dice en la pobreza, y de la mujer del ecuatoriano Christian Benítez o de la familia del regiomontano Antonio De Nigris, quien al fallecer, detonó la división entre los suyos por culpa de los ahorros en distintos bancos.
Así, ¿para que sirve ser millonario?…
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