Monterrey, N.L.-
Rosaura Barahona, Roberto Hernández Jr. y Raúl Ramos, fallecieron recientemente y Julio Galán, hace poco más de una década, pero los cuatro dejaron huella en la memoria de los nuevoleoneses.
Ayer, la Dirección de Cultura del Municipio de Monterrey, brindó un homenaje póstumo a estos personajes célebres de la localidad dedicándoles un altar que fue instalado en el patio del Museo Metropolitano, en el que además se realizó una celebración del Día de Muertos.
La ceremonia inició con una procesión en la Plaza Hidalgo, para posteriormente ingresar al recinto en donde se encontraba el altar con una enorme cruz en medio de las cuatro fotografías de los seres que en vida hicieron una gran aportación a la comunidad en sus respectivos ámbitos.
Los asistentes presenciaron una danza prehispánica en la que los ejecutantes esparcían el humo del copal como parte del ritual a la ofrenda de muertos.
“El día de muertos es una celebración tradicional mexicana de origen mesoamericano que honra a los difuntos ; arraigada principalmente el centro del país, sin embargo gracias a la promoción de las instituciones culturales y de algunos museos, desde hace 25 años esta tradición la hemos vuelto totalmente regiomontana.
“Año con año recordamos de diferentes maneras a los que ya no están”, expresó Luis Nevárez, el director de Cultura del Municipio de Monterrey.
Por su parte, el periodista, promotor cultural y poeta Arnulfo Vigil, leyó una breve semblanza de los cuatro personajes que fueron elegidos para que les fuera dedicado el altar de muertos 2017 instalado en el Museo Metropolitano de Monterrey.
“Vamos hoy a conmemorar la vida de cuatro personajes; yo digo la vida porque su legado, sus contribuciones al engrandecimiento de Monterrey, gracias a ellos Monterrey ha avanzado en grandes aspectos: la cultura, el periodismo, la educación, el deporte, la música”, manifestó.
Mencionó que en sus editoriales, Rosahura Barahona resaltaba valores como la franqueza, la honestidad y la valentía, valores que actualmente se han perdido debido al consumismo y a la corrupción.
De Roberto Hernández Jr. señaló que siempre estuvo en medio de la polémica, pues para algunos era un “simple gritón” y para otros un “una enciclopedia del fútbol”, y lo cierto es “que su nombre está escrito junto al de grandes narradores de este deporte como Ángel Fernández, Ángel Robles y Gerardo Castro, por mencionar algunos “.
Sobre Julio Galán dijo que “irreverente” podría ser su segundo apellido, porque hizo de la irreverencia su arte y él mismo fue el eje central de su obra, ya que aparecía en sus cuadros vestido de diferentes personajes como de mujer, de niño, “y con estos elementos dio a conocer su obra mexicana siempre solicitada en Nueva York, París, Londres, España, Amsterdam, La Habana , Canadá y todo desde aquí, su casa en Monterrey”, añadió Vigil.
Y finalmente destacó que Raúl Ramos ocupa un lugar importante en la historia del Rock en Monterrey, así como en la historia de la animación infantil, ya que el músico fue el fundador del grupo Los Vip´s, muy popular entre los regiomontanos que crecieron en los años 70s y 80s.