Realmente, para mi sorpresa, han sido muchos menos los memes y la carrilla de los seguidores en contra de rivales y vecinos, albiazules y felinos, sobre todo en redes sociales.
Es casi inexistente.
Me parece que la tensión se siente en el ambiente… tanto, que podría cortarse con un cuchillo, diría Truman Capote.
¿Tienen miedo?
La verdad…
Este Clásico es diferente.
Nadie, ni unos ni otros, admitirán que tienen miedo. Primero muertos que vernos mal.
Lo que sí tienen ambos es respeto.
Tampoco lo admitirán.
Pero es evidente que ambas escuadras se han ganado el respeto del contendiente y de la afición rival. No respetar a esos equipos, sería una obtusa necedad.
MOHAMED
Cierto es que Monterrey tardó en hallar su mejor performance bajo las órdenes de de Ricardo Antonio.
No están lejanos los días en que muchos, con razón o no, pedían que lo echaran.
Ese equipo no estaba jugando bien. Traían un desorden medio regular. Defendían y atacaban mal; y aparte se notaba malestar interno que al final detonó con la salida de dos colombianos y un uruguayo.
Y no era un tema menor, de hecho, con una disculpa forzadísima de por medio, trataron de una grave acusación de pedir “moche” a un jugador para poder ponerlo en el escaparate que representa el tapete verde, en lugar de hacerlo comer banca.
Al final, todo quedó en un escandalito y nadie supo en realidad si fue verdad o no.
Con ciertos ajustes, halló su cuadro ideal con toda una constelación de figuras traídas del Cono Sur, algo que ni el sueño les quita a los fans de casa, que no les importa la procedencia de sus estrellas si logran llevar otra copa a sus vitrinas.
Hoy, instalados en la cima, ven al resto sobre el hombro y nada más les falta vencer a Tigres –casi nada– para coronar su tremendo semestre de logros y conquistas.
Mohamed lo hizo con Xolos, con América; ya estuvo a punto de tocar el cielo con los dedos con sus Rayados y hoy tiene de nuevo la oportunidad de corroborar con un título que sabe y puede.
FERRETTI
El profesor Ricardo Ferretti de Oliveira debe ser el entrenador más respetado en la Liga MX con más partidos encima, solo superado por el centenario y legendario Nacho Trelles.
Ha estado en más Finales del torneo tenocha que ninguno otro.
Algunas las ha perdido, otras las ha ganado.
A mucha gente no le gusta como juegan sus equipos. Algo que no despeina a ese gruñón entrenador y mucho menos a sus directivos que ya lo firmaron por los siglos de los siglos. Amén.
Ferreti no solo como jugador era una cosa esplendorosa, como DT, sus resultados lo avalan.
Los fans felinos lo adoran y lo odian una semana sí y la otra también.
Los mismos que salen gritando un sábado por la noche del Universitario ¡Fuera, Tuca!…. son los mismos que cuando dejaron al América todo zarandeado en aquella dramática Final de los penales, le gritaron: ¡Tucaaaa, hazme un hijoooo!!
Sus finales suelen estar aderezadas con tres cucharadas de drama, si no, no valen.
Las que ha gando y las que ha perdido.
Ninguna le sabrá tan bien como aquella que le ganó como jugador a las Águilas en 91, con un zapatazo violento que le tiró desde allá, le rompió el arco a Adrián Chávez y de haberle metido la mano, se la tumba.
El profesor Ferreti es una liebre muy lampareada. Se la sabe casi de todas, todas…
De hecho esta Final consta de tres partidos, no de dos.
El primero ya se jugó hace dos semanas. El triunfo permitió a Rayados “ganar” la posibilidad de ser el dueño de la cima total.
Al jugar a medio gas ese partido, Ferretti se la tocó de primera al turco. Cortita y al pie.
La pelota, es decir, la presión, está en la cancha rayada. Los obligados a ganar y cerrar en casa son los de azul y blanco, Tigres, como dijimos ayer o anteayer, va a tratar de hacer lo que pueda este jueves y el domingo también.
¿Lo ven así los Tigres y su cuerpo técnico?
No lo sé…
Dejando por un lado esas teorías, Monterrey es favorito (para mí). Ligeramente… un 55% contra un 45 de posibilidades para Tigres, simplemente por la forma futbolística mostrada hasta ahora de unos y otros.
Veremos, pues…
No se vayan. Regreso…