Cd. de México.-
Ante la violencia que se vive en el país, la jerarquía católica no puede quedarse callada y tampoco basta con señalar, sino que se debe pugnar por la aplicación de la justicia para que los crímenes no queden impunes, afirmó Alfonso Miranda Guardiola, secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Miranda, quien es obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Monterrey, alertó: “Asistimos a una violencia recurrente a una falta de aprecio por la vida, una vulnerabilidad contra la dignidad de las personas. No podemos quedarnos callados sin hacer nada. Como católicos, como cristianos, tenemos que empeñarnos más en la construcción de la paz”.
Expresó la preocupación de la Iglesia católica por el clima de violencia que prevalece en México, no sólo contra los sacerdotes, sino contra la población en general.
Resaltó que la violencia y la corrupción no atañen únicamente al gobierno, sino que todos los sectores, tanto Iglesia como sociedad civil deben ser parte de la solución.
“La impunidad está presente en nuestro país en un alto porcentaje. Es un problema nacional, tenemos que trabajar más para que se realice la aplicación de justicia. No basta con señalar, hay que llegar a la aplicación de justicia para que no queden impunes los crímenes”, dijo.
