Monterrey, N.L.-
El artista mexicano de origen judío Yishai Jusidman quiso que su pintura dejara una huella sobre el Holocausto y luego de seis años de investigación y trabajo, terminó la serie titulada “Azul de Prusia”.
El Museo de Arte Contemporáneo exhibirá en sus muros la obra de Jusidman, quien actualmente reside en Los Ángeles, California, pero que estará presente en la inauguración que será el próximo 27 de abril.
Cabe mencionar que Marco había albergado obra del pintor capitalino en el 2002 con las series “Mutatis Mutandis“ y “Workging Painters”.
Y ahora regresa con esta muestra que procede del Museo Universitario de Arte Contemporáneo (MUAC) en la que aborda el tema del Holocausto, que a su parecer no había sido tratado suficientemente en la pintura, en comparación con el cine y la fotografía.
El deseo por concentrarse por tanto tiempo en este proyecto surgió luego de que asistió a una exposición del artista belga Luc Tuymans sobre el Holocausto y ahí observó que las pinturas no estaban muy definidas.
“Por razones extrañas el tema no ha sido tratado con la amplitud que se requiere; cuando yo vi la exposición de Luc Tuymans en el 2010 en el Museo de Arte Moderno de San Francisco, me encontré con la serie que el produjo a finales de los 80 y a principios de los 90 precisamente sobre el Holocausto.
“En las pinturas, Tuymans toma unas imágenes, algunas fotografías que encuentra y las pinta de alguna manera bastante ambigua, rápida, más como un esbozo; de modo que el sujeto del cuadro no se alcanza a entender bien y los curadores del museo argumentaron que el pintor estaba proponiendo que el Holocausto no se podía representar“, apuntó Jusidman.
Y en base a esto, consideró que tanto como pintor y como judío el ver las pinturas de Tuymans y leer la apología de los curadores sobre ellas le provocó la inquietud de demostrar lo contrario y se planteó la posibilidad de hacer algo al respecto.
“Me pregunté: ¿Quién hasta entonces ha hecho pinturas sobre el Holocausto que no asuma el fracaso necesario? y realmente no pude dar con muchos pintores que haya asumido el reto a partir de el fin de la Segunda Guerra Mundial y me pareció muy extraño”, reflexionó.
Mencionó que a partir de ese momento asumió el reto de generar una serie de trabajos que no asumieran el fracaso en la pintura, pero sí intentaran de una manera honesta encontrar la relación concreta entre la pintura y el Holocausto y que la representación pudiera considerarse válida.
Jusidman explicó que para trabajar en la serie “Azul de Prusia” inició su investigación y encontró un dato importante: en las cámaras de gas ocurrió un accidente químico del que resultó un pigmento que le da el título a esta obra.
“MIentras sucedía el genocidio, el gas cuyo elemento tóxico es el cianuro, se combino con el hierro, elemento que estaba contenido en las paredes de las cámaras de gas, particularmente el hierro en el ladrillo de las paredes y por cuestiones accidentales el cianuro se combinó con el hierro y con el tiempo empezaron a salir manchas azules sobre las paredes de las cámaras de gas.
“Las manchas azules siguen visibles en algunas de las cámaras de gas que no fueron destruidas por los alemanes en su retirada, pero algunas siguen en pie y todavía se pueden ver estas manchas de un azul muy intenso.
“Y bajo análisis químico se ha encontrado que el compuesto que contiene la mancha es el ferrocianuro y resulta que este es un pigmento que los pintores hemos usado en los últimos 300 años que se llama casualmente `azul de prusia´y fue en ese momento entendí que ese color era el ancla que me daría la posibilidad de hacer una serie de pinturas sobre el Holocausto, en el que la representación fuera garantizada por ese pigmento”, puntualizó.
Organizada por el Museo Universitario de Arte Contemporáneo (MUAC) y la Universidad Autónoma de México (UNAM) Azul de Prusia se ha presentado desde su creación en 2013 en The Americas Society, Nueva York; MUAC, 2017; Museo Espacio, Aguascalientes, 2017 y el YBCA, San Francisco, E.U.A en este mismo año para después ser presentada en MARCO, donde estará abierta al público hasta el 15 de septiembre de 2018.