Reynosa, Tam.-
Llegó la primavera y junto con ella el verde de los árboles, arbustos, hierba y todo tipo de flores con sus múltiples colores, pero también la alergia a los diferentes pólenes que viajan varias millas a través del aire hasta llegar a la nariz de los alérgicos.
De esta forma, la que es considerada la estación más bonita del año para algunos, para otros se convierte en un calvario.
El especialista en alergias, Eliseo Tavárez Torres, explicó que, al iniciar la primavera aumenta la concentración de pólenes, debido al crecimiento de plantas y árboles, por lo que las personas que son sensibles desarrollarán una reacción al respirar el aire que los contenga.
“La principal enfermedad provocada por los pólenes en Estados Unidos es la rinitis alérgica y ocupa el quinto lugar en las enfermedades que llevan a un paciente al hospital, es un problema de salud pública que altera la calidad de vida produciendo ausentismo escolar y laboral”, mencionó.
SÍNTOMAS
El médico certificado por el Consejo Nacional de Alergia e Inmunología Clínica y Asma, indicó que en esta época las personas alérgicas sufren grandes trastornos en su organismo, presentando síntomas como inflamación, obstrucción y congestión de vías respiratorias, mayor producción de secreción nasal cristalina y comezón.
“Si estos síntomas duran más de 10 días y están presentándose de forma constante, se debe buscar la ayuda de un especialista en alergias, que identificará a través de estudios si hay alergias o no”, detalló.
El también miembro del Colegio Mexicano de Alergia dijo que por medio de unas pruebas cutáneas es posible identificar el tipo de alergias que la persona padece y darle un tratamiento específico para el bienestar de su organismo.
“Se usa lo que llamamos multitest, que es un instrumento impregnado de pólenes que se aplica en la piel y si el organismo es alérgico va a haber una reacción local de inflamación y enrojecimiento, se hace una roncha, y en 15 o 20 minutos tenemos el resultado”, comentó Tavárez Torres.
Las alergias no se adquieren, se nace con ellas y cuando el medio ambiente es propicio aparecen los síntomas, y de no ser atendidas adecuadamente se produce una malformación porque hay un sufrimiento respiratorio.
“Esto conlleva una alteración de su estado emocional y de salud, teniendo como resultado una calidad de vida muy pobre”, explicó.
A raíz de esto, puede presentarse un mal descanso por las noches, irritabilidad y mal humor.
EL AIRE COMO CONDUCTOR
Tavárez Torres dejó en claro que, aunque el paciente haga modificaciones en su casa o lugar de trabajo, hay aspectos que no puede controlar, ya que los pólenes viajan por medio del aire.
“Aunque el paciente no tenga árboles o plantas, si hay en su colonia y en la región y los pólenes pueden viajar a través de las corrientes de aire hasta 400 o 500 millas de distancia del sitio donde se producen y aunque tengamos puertas y ventanas cerradas, se filtran”, expresó el especialista.
También en el contacto con otras personas que han estado expuestas a ellos, o a través de las mascotas que almacenan los pólenes en su pelaje, se pueden sufrir las crisis alérgicas, por lo que recomendó bañarse y cambiarse de ropa inmediatamente al llegar a su casa.
Finalmente comentó que, a pesar de los grandes avances en ciencia y tecnología, mejores medicamentos y técnicas de diagnóstico, las alergias se han incrementado debido al aumento de la población generándose mayor contaminación.
“La contaminación ha provocado tal alteración a nuestro planeta que, por ejemplo, los inviernos ya no duran lo mismo, provocando que las plantas perduren más tiempo y aumentando la concentración de pólenes y perdurando los síntomas”, apuntó.