Monterrey, NL.-
En una ola de ataques a balazos como hacía años no se veía en la zona metropolitana de Monterrey, cuando menos 11 personas perdieron la vida y otras 15 resultaron heridas, durante la medianoche del sábado y los primeros minutos de este domingo.
Las acciones criminales fueron ocurrieron en Monterrey, Guadalupe y Juárez de manera simultánea, aunque se tiene reportes de incidentes violentos en Santa Catarina, San Nicolás, San Pedro y Cadereyta Jiménez, de acuerdo a denuncias en redes sociales.
Los primeros reportes se tuvieron a las 00:20 horas, en el centro de Monterrey donde fueron balaceados clientes y empleados de los bares La Jarra ubicado en Colón y Pino Suárez, y El Baccará y El Ancla, ubicados en Juan Álvarez y Arteaga, lo que inicio una amplia movilización policial y militar en la zona.
El saldo preliminar fue de nueve heridos de bala, varios de ellos en estado grave fueron llevados a diversos hospitales por las corporaciones de auxilio.
En el municipio de Juárez el saldo mortal es de seis muertos, entre ellos una mujer, como consecuencia del ataque al bar Rancho Viejo, que se localiza en avenida Camino a Rancho Viejo en la Colonia Los Nogales.
En ese lugar, un grupo de delincuentes irrumpió en el bar y acribilló a cinco hombres y una mujer.
Mientras que en la colonia Cañada Blanca del municipio de Guadalupe, los atacantes lograron ultimar a dos hombres clientes del bar Bohemio, ubicado en San Luis Potosí y Bulevar Acapulco.
En el bar La Mitotera ubicado sobre la Avenida Aztlán en su cruce con Bartolomé Mitre, en la Colonia San Bernabé al noreste de Monterrey, dos hombres murieron y una mujer resultó herida en otro de las agresiones a balazos perpetradas por un grupo de individuos, quienes y tras descender de sus vehículos accionaban sus armas de grueso calibre.
También en Monterrey pero en la zona sur, concretamente en la colonia Caracol en los límites con Guadalupe, otro hombre perdió la vida de manera instantánea durante el ataque con armas largas, mientras que cuatro más resultaron heridos. Todos eran clientes del bar Wichos.
Aunque las diversas corporaciones policiales estatales y municipales, así como del Ejército y la Marina Armada de México montaron patrullajes en toda la zona metropolitana, no se informó de detenidos.