México, D.F.-
Muchos scouts consideraron que una estancia de seis años en las granjas del mejor beisbol del mundo significaba que Miguel Ángel González sería un lanzador incapaz de madurar para jugar con los mejores. Pero aquel 29 de abril de 2012, cuando el sonido del Rogers Centre de Toronto alertó sobre el cambio de lanzador en los Orioles de Baltimore, “El Mariachi” opacó las críticas y comenzó a vivir lo que siempre soñó: ser un pelotero de primera línea en las Grandes Ligas.
A días de arrancar su tercera campaña en el mejor beisbol del mundo, el tapatío busca consolidar su andar y que a la par de ello, su equipo se afiance en una división complicada como el Este de la Liga Americana.
“Espero que sea mi año. Me siento fuerte, tenemos un equipo con grandes jugadores y el pitcheo suficiente para competir. Sabemos que los otros rivales se reforzaron, pero estamos listos para dar batalla”, refirió González quien será el tercer abridor en la rotación del manager Buck Showalter.
Sobre los cambios que hay en el interior de los Orioles, El Mariachi consideró que fueron muy críticos con el trabajo del coach de pitcheo Rick Adair, quien fue sustituido por Dave Wallace.
“Dave es una persona que está acostumbrada a trabajar con jóvenes, durante lo que va de pretemporada nos ha ayudado a desarrollar nuestros pitcheos. Con Rick Adair la gente fue muy crítica y piensan que el pitcheo se nos cayó al final de la temporada por su culpa, pero no fue así. Fue una suma de sobrecarga de varios pitchers lo que hizo que nos fuéramos para abajo”, analizó González, quien ve con buenos ojos la llegada a Baltimore del venezolano Ubaldo Jiménez.
“Todo lo que se haga por el bien del equipo debe ser aplaudido. Estoy contento en Baltimore. Yo quiero seguir aquí, ellos fueron los que me dieron la oportunidad de subir, me gusta la forma que llevan el equipo desde la cabeza hasta abajo”, señaló González, quien formará parte del cuerpo de abridores junto a Jiménez, el coreano Wei-Yin Chen y Chris Tillman, quien se encargará de subir a la loma en el juego inaugural de los Orioles de Baltimore.
González, que a finales del año pasado se convirtió en padre, aseguró que todo el sacrificio que ha hecho y los años que pasó en las ligas menores valen la pena.
“Todo lo hago por mi familia, ellos son mi fortaleza y los que me impulsan día con día a trabajar más y ser mejor. Son base en mi vida. Para mí es lo más importante que tengo en mi vida”.
Por último, el serpentinero mexicano, apodado El Mariachi por su gusto por la música vernácula y en especial por Vicente Fernández, pronosticó una temporada altamente reñida, pues la división tiene a los Medias Rojas, campeón de Grandes Ligas, los reforzados Yanquis de Nueva York, los Azulejos de Toronto, que cuentan con un lineup agresivo y las Rayas de Tampa Bay.
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