México, D.F.-
El titular de la Secretaría de Agricultura, Enrique Martínez y Martínez, se pronunció por fortalecer los esquemas de atención a la agricultura familiar, con el objetivo de promover el arraigo de la población en las comunidades rurales.
“Necesitamos hacer un esfuerzo para poder arraigar más con políticas públicas direccionadas a las familias, porque esa agricultura familiar no tan sólo es lo que se puede entender la agricultura de autoconsumo o para la pequeña producción, sino también para el arraigo de nuestras familias en el campo”, expresó.
Por ello, al participar en la toma de protesta de Víctor Manuel Villalobos Arámbula al frente del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), afirmó que el gobierno mexicano impulsa políticas encaminadas a desarrollar la productividad y asociatividad en ese rubro de la agricultura.
Ello, a fin de evitar la migración de los pobladores del medio rural, donde de manera creciente los jóvenes se van al medio urbano y menos gente se queda a trabajar en el campo.
En este marco, el funcionario mexicano dijo que el fortalecimiento del medio rural se verá reflejado en la reforma del campo que presentará el presidente Enrique Peña Nieto.
“Será una reforma de alto calado que atenderá los puntos más sensibles de cómo hacer producir el minifundio, donde el 77 por ciento de la tierra en México pertenece a productores de menos de cinco hectáreas y que tienen dificultad para ser productivos”, sostuvo.
A su vez, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, estableció que el desarrollo agrícola es un factor que contribuye a la seguridad alimentaria, por lo que los países deben hacer un esfuerzo para fortalecer el sector primario.
Por su parte, el director general del IICA, Víctor Manuel Villalobos Arámbula, llamó a los países que lo integran a impulsar la innovación y la transferencia de tecnología como un mecanismo para hacer frente a los retos en el sector y generar modelos que permitan mayor productividad y rentabilidad.
Finalmente dijo que en su segunda gestión se mantendrán vigentes cuatro objetivos: incrementar la productividad y la competitividad de la agricultura, promover su adaptación al cambio climático, aumentar la inclusión de todos los productores en las cadenas de valor e impulsar cambios para alcanzar la seguridad alimentaria hemisférica.
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