Cd. de México.-
El contrabando de combustibles, llamado “huachicol fiscal”, sigue vigente e incluso cada vez son más las personas y empresas que deciden comprarlo por sus precios bajos, dijo la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
Por ello, manifestó, es necesario que las autoridades del sector energético coordinen y sumen esfuerzos con el Servicio de Administración Tributaria (SAT), Secretaría de Comunicaciones y Transportes, con la Fiscalía General de la República, entre otras, para erradicar estas prácticas porque a la fecha “siguen sin ser atendidas”.
“En los últimos meses se ha observado que el ‘huachicol fiscal’ ha seguido en el mercado del diésel y ha ido avanzando en el mercado de gasolina, lo cual perjudica severamente a las empresas que importan de manera legal”, explicó la Confederación.
Aunque es una actividad ilícita, personas físicas y morales compran y venden el combustible que se obtiene por contrabando en las principales aduanas y puertos del país, sostuvo.
Se sabe que hay quienes declaran ante aduanas el proceso de importación de lubricantes, cuando en realidad se trata de diésel ultra bajo azúfre o se declara un menor volumen de producto al que realmente entrará por aduanas, refirió.
“Lamentablemente cada vez son más las empresas, estaciones de servicio y usuarios finales que deciden comprar combustible ilegal por sus precios bajos”, afirmó la Coparmex.
Para la Coparmex, “el combate efectivo a la corrupción se da cuando las instituciones cumplen con su función y se hace valer el Estado de Derecho. Desde Coparmex hacemos patente nuestro compromiso de colaborar para denunciar este tipo de hechos ante las autoridades”.